El asesino de campesinos será juzgado en Tudela y Lleida. La corte de apelación de Montpellier ha confirmado este martes la extradición a España del yihadista Allah El Mourabit, de 54 años y nacionalidad marroquí, por los dos crímenes cometidos, supuestamente, en Navarra y un tercero en Lleida. Así lo ha comunicado al Juzgado de Instrucción número 3 de Tudela esta noche. El acusado fue detenido hace dos semanas, el 25 de marzo, en la localidad de Béziers, en Francia, tras una investigación conjunta de la Policía Nacional, la Guardia Civil y los Mossos d'Esquadra que duró casi un año y medio.
Primero pasará por Tudela y después irá a Lleida por los tres crímenes
En estos momentos, la previsión es que, una vez sea entregado a la justicia española por parte de las autoridades francesas, lo haga, en primer lugar, para declarar ante el Juzgado de Tudela, dado que fue lo que dictó la orden de detención europea. Instruye, además, los dos crímenes que habría cometido El Mourabit en las localidades de Tudela y Ribaforada, donde asesinó a dos agricultores el 22 de noviembre y el 21 de diciembre de 2023, respectivamente. Más tarde pasará ante los magistrados de Lleida que lo investigan por el tercer homicidio: el de un payés en Vilanova de la Barca (Lleida) el 5 de enero de 2024.

Los tres campesinos, todos de edad avanzada, fueron asesinados violentamente, a golpes y con armas blancas como machetes, y mientras trabajaban en el campo. Cabe recordar, no obstante, que el arrestado, dos meses antes del primer crimen, se había quitado la pulsera telemática que le habían colocado en sustitución de la pena de prisión que se le había impuesto tras ser condenado por yihadismo por la Audiencia Nacional, en uno de los casos fue sentenciado a tres años de cárcel y en la segunda fue absuelto.
Localizado por el móvil en Francia
Tal como explicó ElCaso.com, el hombre fue localizado en Béziers por el teléfono móvil, dado que vivía escondido, cambiando habitualmente de ubicación e, incluso, viviendo en la calle. Además, no consta que recibiera ningún tipo de cobertura familiar en el momento de la detención para evitar ser pillado por la policía. Finalmente, lo lograron encontrar por el móvil, pero no se dejó arrestar fácilmente: se mostró muy agresivo y dos agentes de la policía francesa resultaron heridos e, incluso, tuvieron que utilizar la pistola Taser para reducirlo.