Este miércoles por la tarde saltaban todas las alarmas. Una patrulla de los Agents Rurals localizaron, en Sant Sadurní d'Anoia (Barcelona) junto a una viña, una instalación donde, de manera ilegal, varias personas estaban sacrificando corderos con el fin de ser utilizados en la tradicional celebración del Eid al-Adha, una de las fiestas de la religión musulmana más importantes del calendario. Los Agents Rurals confirmaron lo que se esperaban, que las personas que había en la zona y que estaban matando a los animales sin ningún tipo de seguimiento ni control veterinario, no tenían ninguna autorización ni licencia de actividad para llevar a cabo los sacrificios.

La patrulla intentó identificar a las personas que había en la zona, donde se detectaron incluso jóvenes, menores de edad. Algunas de las personas que había en este matadero ilegal e improvisado no querían colaborar con los agentes y necesitaron activar, desde la sala de mando, colaboración policial. Varias patrullas de los Mossos d'Esquadra fueron también hasta la zona y pudieron identificar, sin más incidentes, a las personas que había, todas de nacionalidad marroquí.

Animales sacrificados para celebrar la Fiesta del Cordero

Según explicaron, los sacrificios de los animales, que se hacían al aire libre, sin ninguna medida higiénica ni veterinaria, estaban relacionados con la Fiesta del Sacrificio o la Fiesta del Cordero, cuando la religión musulmana recuerda, con el sacrificio del animal, el episodio coránico del sacrificio del hijo de Abraham. Algunos de los agentes que participaron en el operativo han explicado que las imágenes eran escabrosas, con charcos de sangre por todos lados, animales agonizando y animales colgados mientras perdían sangre, algunos todavía vivos.

En total, según ha podido saber ElCaso.com, los Agents Rurals y los Mossos d'Esquadra contabilizaron una cincuentena de corderos vivos, que este jueves han sido retirados por parte de veterinarios del Departament d’Acció Climàtica y siete de muertos, que se han inspeccionado y se han enviado a destruir. El hallazgo de este matadero se ha conocido hoy, al día siguiente de saberse que los Mossos y los Agents Rurals detectaron, en Torrelavit, en la misma comarca, una granja ilegal con unos 500 corderos, también destinados a esta celebración religiosa musulmana. La explotación, que no tenía ningún tipo de control sanitario ni veterinario, estaba dirigida por una comunidad religiosa del Baix Llobregat, que tenía intención de vender los animales a sus fieles para celebrar la Fiesta del Cordero.