Nadie sabe qué hacen ni a dónde van. La estupefacción en los científicos y zoólogos se ha convertido ya en preocupación: una manada de 15 elefantes camina desde hace casi 50 días sin rumbo por los campos del sur de China y dejan a su paso cultivos devastados y estructuras dañadas.

"No tenemos forma de saber a dónde se dirigen"

A mediados del mes de mayo, esta manada de elefantes asiáticos salió de la reserva de Xishuangbanna, una región china fronteriza con Laos y Myanmar, y se dirigen en dirección al norte.

Elefantes China / Cedida

Elefantes China / Cedida

A pesar de la intervención de las autoridades con camiones e incluso alimentos para incitarlos a que regresen a la reserva, los paquidermos han seguido su camino, relata la BBC. Todo ha sido en vano. A una manda de elefantes no se la mueve fácilmente.

"No tenemos forma de saber a dónde se dirigen", señaló Chen Mingyong a CCTV, profesor de la Universidad de Yunnan y especialista en el estudio de elefantes salvajes.

"Es común que los elefantes asiáticos migren, pero en el pasado eso ha sido principalmente para buscar comida dentro de su hábitat. Un éxodo hacia el norte es bastante raro", agregó, según la misma fuente.

Una única teoría

No hay un amplio consenso en ninguna de las hipótesis para explica lo sucedido. Pero existe una teoría: Tras los esfuerzos de conservación del gobierno chino, la población de elefantes del país ha crecido en los últimos años. Sin embargo, el área deforestada continúa creciendo, lo que reduce el hábitat y el suministro de alimentos para estos animales. Es decir, los elefantes se moverían en busca de comida. Además, su contacto con los humanos ha aumentado.

Precisamente los humanos de la zona son los que están sufriendo las consecuencias de este éxodo. Los cultivos de las poblaciones al paso de la manada quedan devastados y hay psicosis e impotencia entre los ciudadanos. "Son inteligentes. Cuando empezaron a cruzar los límites de las reservas naturales y entrar en áreas más pobladas, encontraron que los cultivos eran más atractivos que en los bosques ”, dijo Ahimsa Campos-Arceiz, investigadora principal del Jardín Botánico Tropical Xishuangbanna.