María José, la madre de José Carlos, el joven malagueño asesinado a causa de un brutal atropello, ha hablado con los medios para recordar y explicar cómo era su hijo. Además, la mujer ha hecho una conmovedora petición a los amigos y conocidos de su hijo.
El joven vivía con su madre y su abuela
La madre del joven asesinado ha concedido una entrevista al medio Diario Sur, en la cual recuerda a su hijo José Carlos, de veintitrés años, como un joven "humilde, noble, leal y amigo de sus amigos". José Carlos era hijo único y no conoció a su padre, ya que este murió poco después de nacer él; vivía con su madre y su abuela, por quien sentía una gran devoción y la consideraba, de hecho, una segunda madre: "Nos cuidaba mucho", relata a la mujer.
Un amigo del joven explica al Màlaga Hoy que consideraba a José Carlos "un ejemplo". Lo define como un joven responsable, que siempre cuidaba de sus amigos, y muy tranquilo: "Nunca buscaba problemas ni miraba mal a nadie", apunta al amigo. Es por eso que el grupo de amigos todavía no puede creerse que mataran su amigo en una noche de fiesta como tantas otras habían vivido. Adrián, otro amigo de la víctima y que, de hecho, está en el hospital como víctima del atropello, expresó también al Màlaga Hoy su incredulidad ante todo lo que había pasado: "No entiendo cómo ha podido morir un amigo mío sin tener culpa de nada. Solo espero que el juez haga justicia. Se han cargado a una persona inocente. Eso no tiene ni olvido ni perdón".
"Las represalias no sirven de nada"
Precisamente, María José, la madre del joven asesinado, ha querido lanzar un mensaje para tranquilizar a todos los amigos de su hijo, así como a la sociedad malagueña. El mismo día del mortal atropello, las redes sociales se llenaron de mensajes de odio haciendo referencia, principalmente, a la nacionalidad del presunto asesino y de su amigo, que son marroquíes. Además de los mensajes de odio, la ciudadanía también difundió los rostros de los dos investigados, acompañando las imágenes de insultos racistas y xenófobos, además de amenazas. María José ha pedido "respeto" por su hijo y por ella misma como madre, en una conmovedora petición: "Las represalias no sirven de nada", refiriéndose a los mensajes de odio tirados contra las personas inmigrantes estos últimos días con la excusa de defender la muerte del joven. La mujer ha añadido: "Solo quiero que les caigan [de condena en la prisión] todos los años que marque la ley, que para mí siempre serán pocos", según ha recogido Diario Sur, pero en ningún caso quiere que la muerte de su hijo se utilice como propaganda de mensajes racistas. La mujer prefiere centrarse en los actos de homenaje y de amor que los vecinos de Málaga han dedicado a su hijo.
Un atropello presuntamente intencionado
La madrugada del domingo pasado, José Carlos, un joven de veintitrés años, moría en las puertas de una discoteca de Málaga. Un grupo de jóvenes lo golpearon en la cabeza con una botella de vidrio y lo dejaron estirado en medio de la carretera, inconsciente. Mientras sus amigos lo socorrían, dos hombres aparecieron conduciendo a toda velocidad y atropellaron al joven, matándolo en el instante, en lo que los investigadores consideran un atropello totalmente intencionado. Los amigos de José Carlos consiguieron evitar el atropello, pero tres de ellos resultaron heridos; uno de los jóvenes continúa en observación a causa de una rotura renal. El conductor del vehículo ingresó en la prisión el pasado miércoles dieciocho de mayo.