Encuentran una lechuza, una especie protegida en toda España, haciendo de mono de feria y atada a un palo en el centro de Barcelona. Una patrulla de la Guardia Urbana de Barcelona detectó este domingo, 13 de julio, por la noche, que una persona exhibía un pájaro con el objetivo de sacar todo el dinero posible a los turistas que pasean habitualmente por el distrito de Ciutat Vella. El ave, que llevaba una cuerda atada a la pata, era utilizada para que los peatones se hicieran fotografías e, incluso, la pudieran coger. Toda una serie de infracciones, más todavía teniendo en cuenta que este animal tiene una protección especial en todo el Estado por el declive poblacional que ha sufrido en las últimas décadas.
Por todo ello, los agentes de la Guardia Urbana de Barcelona decidieron intervenir, dado que por la estricta protección que tiene, su simple tenencia está prohibida; y rescataron a la lechuza común. Los policías la trasladaron a un veterinario colaborador especializado en fauna salvaje, a la espera de que el órgano competente se haga cargo y se pueda devolver al medio natural lo antes posible. Por otra parte, abrieron diligencias contra la persona implicada por un delito contra la protección de la fauna, por tener al ave prohibida, atada y para sacar rédito económico de los turistas que visitan la ciudad.
Lechuza común, fuertemente protegida
La lechuza común es un ave que, pese a tener pocos depredadores como búhos de grandes dimensiones, las últimas décadas ha sufrido un declive poblacional por la persecución humana. Esto llevó a la protección especial en toda España y entró en el Libro Rojo español de las Aves donde se encuentra catalogada como "en peligro" y se enmarca a varias normativas aprobadas como el Real decreto 139/2011, de 4 de febrero, la Ley 42/2007, de 13 de diciembre, o la Directiva 79/409/CEE del Consejo, de 2 de abril de 1979. Y, todavía más, tras su introducción al Listado de Especies Silvestres de Régimen de Protección Especial, lo que implica que está prohibida cualquier actuación con el objetivo de matarlas, capturarlas, perseguirlas o molestarlas, además de deteriorar o destruir sus nidos.