Un joven de 27 años se quemó a lo bonzo este martes delante del consulado Argelino en Alicante. El motivo de esta acción extrema fue la negativa de los funcionarios de la entidad a expedirle un pasaporte, ya que no reunía los requisitos necesarios para obtenerlo. A consecuencia de eso, el joven sufrió quemaduras de mucha consideración y tuvo que ser evacuado, grave, al Hospital General de Alicante, desde donde lo derivaron al Hospital de la Fe de València, donde ingresó en la Unidad de Quemados.
Los hechos tuvieron lugar en torno a las once de la mañana de este martes 25 de junio. El hombre acudió al edificio del consulado, en la calle Pintor Velázquez número 32, pidiendo que le dieran un pasaporte del país norteafricano. Ante la negativa de los trabajadores, el joven empezó a amenazar a todo el mundo con prender fuego a las oficinas.
Acabó quemándose a sí mismo
Después de las amenazas, abandonó el consulado, y los presentes se pensaron que el asunto acababa así. Poco después, sin embargo, el hombre volvió, acompañado de su pareja, de 22 años, y se prendió fuego a sí mismo, en vez de a la oficina como había asegurado momentos antes. Su novia también sufrió quemaduras en los brazos cuando lo ayudó a quemarse, y también tuvo que recibir asistencia sanitaria, pero sin requerir hospitalización, según ha explicado el diario Información.
La Policía Nacional fue requerida en el lugar de los hechos, así como varias ambulancias del Servicio de Asistencia Médica de Urgencias (SAMU) y los Bomberos. Después de conseguir extinguir las llamas que quemaban al joven, los facultativos sanitarios lo estabilizaron y lo evacuaron urgentemente al hospital. A causa de la gravedad de sus lesiones, se optó por trasladarlo en helicóptero hasta València, donde a estas alturas continúa ingresado, recuperándose.