Unas jeringas usadas tiradas por las calles del barrio de Sant Ildefons de Cornellà de Llobregat fueron el detonante de una investigación de los Mossos d'Esquadra que culminó el pasado domingo 19 de mayo con la detención de dos hombres, de 57 y 75 años, acusados de un delito contra la salud pública en la modalidad de tráfico de drogas. Los arrestados gestionaban un narcopiso en esta zona del municipio del Baix Llobregat especializado en la venta de heroína, que puso en alerta tanto a vecinos como a policías durante el mes de marzo.

 

De hecho, fueron los inquilinos de los bloques de los alrededores quienes expusieron varias quejas delante a la policía catalana sobre el número cada vez mayor de jeringas que aparecían por las calles, y esta alerta puso a los investigadores sobre la pista de un piso en concreto donde detectaron que había una gran afluencia de personas a todas horas del día y de la noche. Haciendo un seguimiento de algunas de estas personas consideradas como sospechosas, comprobaron que se inyectaban con jeringas que después tiraban en plena calle, justo después de salir del domicilio en cuestión.

Un narcopiso de heroína

Los agentes pusieron en marcha un dispositivo de vigilancia que tenía en el punto de mira un piso en concreto donde vieron que vivían de manera habitual dos hombres, a quienes pudieron identificar. De hecho, el hombre más mayor ya tenía antecedentes por tráfico de drogas durante los años 80 y 90. Después de las gestiones pertinentes y de asegurarse de que dentro de aquella vivienda se estaba llevando a cabo una actividad ilegal, los investigadores pidieron autorización judicial para hacer una entrada y registro.

Durante esta actuación, los agentes encontraron en el domicilio de los dos sospechosos sesenta gramos de heroína, varias básculas electrónicas de precisión, dinero en efectivo y otros indicios relacionados con el tráfico de sustancias. Los dos hombres fueron detenidos y pasaron a disposición del Juzgado de Instrucción en funciones de guardia de Cornellà de Llobregat.