El hachís se está convirtiendo en uno de los principales souvenirs de Catalunya. Dos hombres han sido detenidos por los agentes de aduanas del Pertús francés después de que entraran en el país vecino con 135 kilos de esta sustancia estupefaciente en el coche. Los hechos tuvieron lugar el pasado 1 de junio en el peaje del A9 cuando los policías pararon un vehículo alquilado con matrícula francesa. Los dos ocupantes, de nacionalidad belga, explicaron a los agentes que eran unos turistas que habían venido a pasar unos días en Catalunya y que volvían hacia su casa en Alemania.
Aunque los dos hombres aseguraron que no llevaban dinero ni nada de contrabando, los policías quisieron comprobar la carga que llevaban. Al abrir el maletero, descubrieron varias bolsas de basura y bolsas de supermercados que soltaban un fuerte olor de marihuana. Así pues, las abrieron y encontraron dentro de 135 kilos de hachís, 26 de los cuales de polen. Se estima que en el mercado negro francés esta droga podría tener un valor económico de 450.000 euros. Los dos hombres fueron detenidos y puestos a disposición judicial, siendo condenados a tres años de prisión, una multa aduanera de 450.750 euros y a diez años sin poder entrar en Francia.
Catalunya, una de las grandes puertas de entrada del hachís en Europa
Las playas catalanas se han convertido en los últimos tiempos en una de las principales puertas de entrada de hachís en Europa. De hecho, Catalunya se ha convertido en un centro de operaciones para la mafia marroquí y cada vez llegan más embarcaciones desde Marruecos cargadas de drogas. Aquí se encuentran los grupos criminales que la venden y forman un círculo perfecto entre los traficantes y los intermediarios. Sin ir más lejos, en las últimas dos semanas se han producido desembarques en Mataró y la Ametlla de Mar, este último de 4.000 kilos de hachís.