La Policía Local de Castell d'Aro, Platja d'Aro i s'Agaró, en Girona, ha recibido, este sábado 18 de octubre, cuando faltaban cinco minutos para la una y media de la tarde, el aviso de un vecino que estaba viendo cómo un hombre, a quien no reconocía, estaba accediendo a un domicilio del pueblo, situado en la calle Gironès, en el término municipal de s'Agaró. Hasta el lugar se desplazaron varias patrullas de la policía, que tomaron declaración al testigo, el cual les explicó que el individuo, al ser descubierto, huyó corriendo, y se intentó esconder en otra vivienda de la misma calle.
Gracias a la descripción que facilitó el vecino y a la coordinación entre las diferentes patrullas que participaron en el operativo, los agentes pudieron identificar rápidamente la vivienda donde se habría refugiado el sospechoso. La Policía Local contactó con las personas que residían en aquella vivienda y constataron que dentro de la casa vivía una familia, que en aquel momento, por suerte, no estaba. Los agentes, que tenían muy claro que el hombre que buscaban estaba dentro de la casa, intentaron dialogar con el individuo para que saliera de la casa y facilitara su identificación, pero no obtuvieron ninguna respuesta positiva.
Se cambia de ropa para no ser identificado
La policía, ante una situación de delito flagrante de robo con fuerza, decidió finalmente entrar en el domicilio donde el hombre que buscaban se estaba escondiendo. Subieron a la primera planta —de donde habían oído ruidos— y lo localizaron. Los agentes comprobaron que el individuo se había cambiado de ropa para evitar ser reconocido cuando volviera a caminar por la calle. Con todo, la policía detuvo al hombre, de 24 años y vecino de Cassà de la Selva (Girona) como supuesto autor de un delito de robo con fuerza en grado de tentativa y de un delito leve de daños. La nacionalidad del hombre y sus antecedentes policiales, sin embargo, no se han comunicado.
Los agentes, tras la detención, comprobaron el estado del domicilio donde el individuo se había escondido y pudieron constatar que el hombre había roto una ventana para acceder a la vivienda y había dejado los restos de cristal en el suelo. Además, pudieron comprobar que el detenido habría intentado acceder a la vivienda escalando por una parte del muro de la finca.