Accidentada noche de fiesta para un joven en la ciudad de Barcelona. Esta pasada madrugada del miércoles la Guardia Urbana de la capital catalana recibió el aviso que se estaba haciendo una fiesta dentro de un piso en el barrio de la Verneda que estaba generando mucho ruido y molestias a los vecinos. Así pues, una patrulla de la policía municipal se desplazó hasta el domicilio en cuestión para advertir a los responsables, pero cuando picaron al timbre del portal, nadie contestó. Cuando los agentes estaban intentando que alguien les abriera, sin embargo, salió una vecina del edificio salió en el balcón y les advirtió que un hombre medio desnudo se acaba de colar en su casa.

Se escapa de la fiesta y se intenta esconder en casa de la vecina

Al ser alertados, los agentes entraron rápidamente el bloque de pisos y se encontraron cara a cara con un hombre medio desnudo que estaba saliendo del ascensor. Cuando los efectivos policiales le preguntaron que hacía allí y en aquel estado, el chico los respondió que estaba en una fiesta en casa de un amigo y se asustó al oír que la policía estaba llamando a la puerta. Lejos de abrir la puerta o intentar no generar molestias a los otros vecinos, optó por descolgarse por el balcón hasta el piso inferior y colarse en casa de la vecina que en aquellos momentos estaba tranquilamente en el sofá de su casa.

La mujer, que no se esperaba que un desconocido entrara en su domicilio por el balcón a altas horas de la madrugada, y todavía menos medio desnudo, se asustó y salió a alertar a los policías, aunque el hombre le dijo que la única intención que tenía era poder salir de allí. Finalmente, después de escuchar tanto las versiones del hombre como de la vecina, los agentes de la Guardia Urbana detuvieron al individuo como presunto autor de un delito de allanamiento de morada. Quizás si se hubiera quedado en el piso de la fiesta en lugar de huir de esta manera, la cosa habría sido muy diferente y no habría tenido que acabar en comisaría.