La Policía Local de Martorell, en Barcelona, recibió en la madrugada de este jueves, 16 de octubre, la alerta de unos vecinos que habían visto cómo un hombre había forzado la persiana del local y había accedido. A raíz de esta alerta ciudadana, hasta el lugar se desplazaron varias dotaciones de la policía y, al llegar, los agentes pudieron comprobar que el acceso principal del restaurante había sido manipulado de manera violenta.
Según han informado fuentes policiales, los agentes comprobaron que en el interior del local había un hombre y decidieron cubrir todos los accesos del restaurante para evitar la posible fuga del sospechoso. Cuando el hombre terminó de recoger su botín, salió por la misma puerta por donde había entrado y se encontró con los agentes, que lo esperaban.
La policía lo identificó y lo registró, y le intervinieron tres teléfonos móviles que pertenecían al negocio. Con esto, el hombre fue detenido como supuesto autor de un delito de robo con fuerza. La Policía Local de Martorell, sin embargo, todavía no ha informado sobre la nacionalidad, la edad ni los antecedentes policiales del individuo.
El detenido fue trasladado a la comisaría, bajo custodia policial, y se espera que en las próximas horas pase a disposición judicial ante el juez en funciones de guardia.
Penas de prisión
En este tipo de delitos el juez de guardia suele dejar en libertad con cargos al detenido, aunque sea multireincidente, a la espera del juicio y la sentencia. Este tipo de robos se considera con fuerza, ya que se ha tenido que romper y manipular el acceso del restaurante para poder acceder a robar.
El Código Penal en Catalunya castiga el robo con fuerza con penas de prisión de entre uno a tres años. No obstante, cuando el delito se comete en un local abierto al público, como es el caso de este restaurante, fuera del horario de apertura, la pena puede aumentar hasta los cinco años de prisión. Además, si se dan circunstancias agravantes como la reincidencia o los daños ocasionados, la condena puede ser aún más severa.