Michael Jackson y Freddie Mercury han sido dos de los artistas más influyentes de la historia de la música. Ambos admiraban profundamente el trabajo del otro y así lo demostraban cuando se veían. Tuvieron unas pocas colaboraciones en las que las melódicas voces de ambos se juntaron.
Durante el mes de febrero de 1984, cuando Freddie Mercury decidió abandonar Queen, comenzó a trabajar en su álbum en solitario y fue a Los Angeles para trabajar con Michael Jackson. La reunión tuvo lugar en el popular rancho del norteamericano, la mítica finca de Neverland, situada en Hollywood. La idea de ambos artistas era la de realizar varias colaboraciones para que ambos pudieran enriquecer más los lanzamientos de sus próximos discos.
Freddie en Neverland
El británico llegó a la casa de Michael Jackson y el de Indiana le sorprendió enseñándole su zoológico particular en el que había animales tan exóticos como elefantes, llamas, cebras, cisnes o cocodrilos. Tras eso, Jackson mostró las habitaciones principales de su lujosa casa a Mercury antes de que ambos bajaran al sótano en el que 'el Rey del pop' tenía su espectacular estudio de grabación.
Una vez allí ambos cantaron juntos en varias piezas. Freddie Mercury y Jackson grabaron para el disco del norteamericano la misteriosa canción Victory que jamás fue publicada. Muchos de los fans de la música querrían poder escucharla, ya que se trata de un tema interpretado por dos de los iconos más grandes de la historia de la música.
Freddie Mercury en un concierto / Europa Press
Un tema que sí fue publicado en el famoso álbum 'Bad' fue State of Shock, que no se grabó en su totalidad y, por los problemas de agenda de Mercury, se decidió que Mick Jagger completaría las estrofas que faltaban. Ambos interpretaron conjuntamente There Must Be More to Life Than This, para el álbum del británico. Pese a ello, cuando salió en el disco 'Mr. Bad Guy' fue publicada sin la voz de Jackson.
Una relación complicada
Ambos genios tuvieron algunos enfrentamientos por los actos y mentalidad de cada uno de ellos y no siguieron grabando conjuntamente. Por lo visto a Jackson no toleraba las adicciones de Mercury con la heroína y la cocaína, incluso llegó a sorpender a la estrella de Queen drogándose en su cuarto de baño.
A Freddie Mercury tampoco le agradaban demasiado algunas actitudes de Jackson, consideraba que el norteamericano era excesivamente ostentoso. Peter Freestone, asistente personal de Mercury, comentó que en una ocasión recibió una llamada del cantante de Another one bites the dust para que le fuese a buscar. Concretamente le dijo: "Me tienes que sacar de aquí, estamos grabando junto a una llama".
Ambos fallecieron siendo todavía figuras influyentes y a una edad muy prematura. Mercury lo hizo en 1991, a la edad de 45 años, por bronconeumonía complicada por el sida. Jackson, por su parte, murió a los 50 años a causa de una intoxicación aguda de propofol y benzodiazepina.