Conducir muchas horas o en momentos del día más intempestivos es uno de los factores que aumentan más el peligro al volante. La conocida como "hipnosis de la carretera" es una de las consecuencias con más riesgo. Así se detecta este fenómeno y los consejos de la DGT para evitarla.

La "hipnosis de la carretera", un fenómeno mortal

Prestar atención a la carretera es uno de los principios básicos de la conducción y los recorridos en carreteras lineales sin paisajes cambiantes suelen provocar aburrimiento en la persona que conduce, que acaba prestando menos atención a la vía.

Las carreteras rectas y sin cambios provocan monotonía al conducir / DGT

Este fenómeno ha sido acuñado por la Dirección General de Tráfico como "hipnosis de la carretera", que se puede traducir como caer en la monotonía de un trayecto y que supone un gran peligro, sobre todo de noche, cuando la visión del conductor disminuye.

Los trucos de la DGT para evitar que nos pase

Para evitar caer en este tipo de trance, la DGT recomienda intentar no mantener la vista fija en un punto del horizonte y hacer barridos con la mirada de forma regular, mirando a nuestro alrededor, estando alerta del entorno y evitando caer en el adormecimiento.

El fenómeno de la hipnosis en la carretera puede hacer que nos durmamos / PxFuel

Otra de las normas generales para conducir durante un tiempo prolongado es la hidratación que, para evitar la hipnosis resulta crucial. Es importante beber agua mientras conducimos para mantenernos hidratados y combatir la fatiga resultante de conducir en un tramo recto.

A esto se suman los descansos obligatorios cada dos horas de conducción, que ayudan a reponer fuerzas, respirar aire fresco y reducir la monotonía del viaje. Y, por último, el truco que se puede hacer con la vista, aparte de los barridos, es fijarse en detalles de la vía o elementos en movimiento o diferentes que nos estimulen y fuercen a estar alerta.

Las horas de madrugada, las más peligrosas

La "hipnosis de la carretera" es además especialmente peligrosa entre las cuatro y las seis de la madrugada, cuando la fatiga y el cansancio aumenta, mientras el nivel de alerta baja. También cabe destacar que la presencia de drogas o alcohol afectan a este fenómeno.

Según datos de Tráfico, aunque la mayoría de los accidentes en España se producen durante el día, alrededor de un 70%, los que se producen de noche o de madrugada con los más letales. Y es que en esta franja horaria se acumula el 40% de los muertos en la carretera, así como un gran porcentaje de accidentes mortales, el 38%.