Un hombre ha resultado herido grave de un tiro este viernes por la noche en Barcelona. El teléfono de emergencias 112 recibió el aviso del incidente alrededor las nueve y media, que informaba sobre una pelea delante de un bar de la Rambla de Prim, en el distrito de Sant Martí de la capital, que escaló hasta que uno de los implicados disparó al otro con una pistola. Hasta el lugar de los hechos se activaron varias patrullas de los Mossos d'Esquadra, así como ambulancias del Sistema d'Emergències Mèdiques (SEM) para atender al herido.
Según las primeras informaciones, los agresores, de etnia gitana, querían utilizar una máquina tragaperras que estaba ocupada por otro cliente, se empezaron a discutir y el propietario del bar, de origen chino, con el objetivo de evitar que estallara un conflicto, intentó poner paz. Desgraciadamente, la situación se les fue de las manos y acabó con la víctima en el suelo, sangrando por una herida en un costado provocado por un disparo. Un agente del ARRO de los Mossos fue el primero a atender al hombre con un parche torácico para tratar el neumotórax que le había provocado el tiro, hasta que llegaron los sanitarios del SEM que lo evacuaron al Hospital del Mar, donde ingresó en estado grave, según ha podido saber ElCaso.com.
Los Mossos buscan a los agresores
A estas alturas, los Mossos d'Esquadra tienen abierta una investigación para aclarar todos los detalles del conflicto y están trabajando paralelamente en localizar y detener al supuesto autor del tiro y a la otra persona que intervino en el conflicto, que huyeron antes de la llegada de las patrullas. Con la descripción dada por la víctima y por varios testigos de los hechos, la policía catalana tiene montado un dispositivo de búsqueda para poder encontrarlos, interrogarlos y arrestarlos.
El último incidente con armas de fuego en Barcelona se registró a principios de agosto, según adelantó ElCaso.com. El lunes 11, una reyerta entre personas de origen dominicano dejó a un hombre herido de un tiro y cinco personas detenidas después de ser interceptadas por los Mossos cuando huían por la Zona Franca. Efectivos de Seguridad Ciudadana y del ARRO consiguieron pararlos en la calle del Foc y les requisaron dos armas escondidas en el capó del coche. El incidente se enmarcó en un ajuste de cuentas entre bandas latinas de L'Hospitalet, según las primeras teorías de los Mossos d'Esquadra.