El supuesto autor material del tiroteo que terminó con la vida de dos personas la noche de San Juan en el barrio de la Font de la Pólvora, Guillermo, de 32 años, ha dormido hoy ya en la prisión de Puig de les Basses, en Figueres. También ha ingresado su pareja, Estefania, de 27 años, quien, según la investigación de los Mossos d'Esquadra, indujo a abrir fuego esa noche que terminó en tragedia. Guillermo salió de su casa con un AK-47, un arma de guerra, y disparó contra todos. Dos personas resultaron muertas y dos más, los hijos de este matrimonio, quedaron gravemente heridos.

También han ingresado en prisión dos familiares más, un hombre de 31 años y un menor de edad; el primero, acusado de cómplice del crimen, y el menor, por haber abierto fuego esa noche con una pistola. A estos cuatro arrestados esta semana en Granada, se suman los dos detenidos que se entregaron en la comisaría de Girona la semana pasada, cuando los Mossos les informaron que estaban en búsqueda y captura, también relacionados con el crimen y por haber ayudado a Guillermo y Estefania a huir. Los seis están ahora en prisión: los cinco adultos en Puig de les Basses y el menor en un centro de internamiento. Todos forman parte del mismo clan de etnia gitana, que vivía entre Font de la Pólvora, en Girona, y el Culubret, en Figueres.

Meses de vigilancia

Cuando pudieron escapar del barrio, la misma noche de los hechos, después de abandonar Vila Roja, un barrio cercano a Font de la Pólvora, el arma de guerra que utilizaron para disparar y matar a dos personas ya había sido identificada por la policía. Las informaciones policiales situaban a Guillermo y Estefania en Granada, donde su familia tiene control sobre algunas zonas. Pinos Puente, el pueblo donde la policía los buscaba, es uno de los puntos calientes de Granada y cuenta con una fuerte tradición gitana. Esta zona había registrado incidentes con armas de fuego y enfrentamientos en los últimos meses, aunque no se pudieron relacionar directamente con los hechos de la Font de la Pólvora.

Los Mossos sabían que Guillermo y Estefania, junto con otras personas implicadas en el crimen de San Juan, se escondían en esa zona de Andalucía. Tenían indicios claros de que la familia les apoyaba y de que el entramado familiar y la geografía de la zona dificultaban la recolección de pruebas necesarias para organizar una redada policial. La vigilancia en Pinos Puente se complicó por las medidas de contravigilancia que tanto ellos como los familiares que los ocultaban tomaban, así como por el control ejercido por los clanes familiares en la zona, lo que dificultaba la entrada discreta de la policía.

Refuerzos de los Mossos d'Esquadra en el barrio de la Font de la Pólvora de Girona / David Borrat
Refuerzos de los Mossos d'Esquadra en el barrio de la Font de la Pólvora de Girona / Foto: David Borrat

Las investigaciones de la Guardia Civil, que esperaban un error de Guillermo y Estefania, se prolongaron durante meses. Finalmente, tuvieron suficientes indicios para creer que se escondían en dos pisos de Pinos Puente. Cuando se recibió la autorización judicial por parte de la magistrada de Girona que lleva el caso, el martes a las cuatro de la madrugada, se asaltaron los dos pisos en Pinos Puente y un tercero en Alcalá la Real, en Jaén, y se consiguió detenerlos. En el interior del piso donde se escondían se encontraron dinero y móviles, que usaban para mantener contacto discreto con otros miembros de su familia. Las detenciones se llevaron a cabo con grandes medidas de seguridad debido a la peligrosidad de los fugitivos, y la intervención fue limpia y rápida.

Después de que se conociera la noticia de su detención, dos familiares más, también en búsqueda y captura, se entregaron en el cuartel de la Guardia Civil. Uno de ellos era el menor que los Mossos habían identificado como el autor de los disparos con un arma corta, que hirieron a un menor la misma noche del enfrentamiento en la Font de la Pólvora.

Traslado a Girona

Después de ser detenidos e interrogados en la comisaría, donde se acogieron al derecho a no declarar, fueron trasladados por carretera hasta Girona. Ayer por la mañana fueron puestos a disposición del juzgado que lleva el caso y que había autorizado las entradas judiciales en los pisos de Pinos Puente. Se realizaron varias ruedas de reconocimiento y se tomó declaración a testigos y familiares de las víctimas.

A última hora, el juzgado de instrucción número 3 de Girona ordenó el ingreso en prisión de los tres adultos y el internamiento del menor. Guillermo es considerado el autor material de los hechos, mientras que Estefania sería la inductora, y el tercer detenido, cómplice, así como los otros dos cuñados, de 23 y 26 años, acusados de haber ayudado en la huida.