La ciudad de Tarragona ha sido esta mañana el escenario de una situación de lo más desagradable. Poco antes de las diez, la Guardia Urbana de Tarragona ha recibido un aviso de parte de los vigilantes del Mercat Central, quienes decían tener a un hombre retenido por un caso de violencia sexual que se había producido en los lavabos del edificio. Desde el cuerpo policial se han enviado tres dotaciones al lugar de los hechos, y cuando han llegado se han encontrado con los vigilantes de seguridad del mercado forcejeando con un hombre. El acusado, de 31 años, ha sido detenido por los agentes de la Guardia Urbana por un delito de agresión sexual. El cuerpo policial no ha querido revelar a este medio ni la nacionalidad del detenido ni si tiene antecedentes previos, aunque se sospecha que puede ser el autor de casos similares que han tenido lugar recientemente.
Los hechos han tenido lugar en los lavabos de mujeres del Mercat Central, cuando un hombre que se había colado ha sido pillado in fraganti con el teléfono, haciendo fotografías y vídeos a las mujeres que había dentro. Como era de esperar, las víctimas se han quejado de la situación y han avisado al personal de seguridad del recinto. Poco después, ha entrado en el lavabo una vigilante del mercado y se ha enfrentado con el hombre, quien, en vez de huir por patas, ha decidido ir todavía más lejos y, no contento con las grabaciones, ha agarrado a la vigilante del pecho —lo que constituye una agresión sexual— y después le ha pegado varios golpes. Ante esta situación, ha entrado en los lavabos otro vigilante, esta vez un hombre, el cual ha conseguido retener al agresor hasta que ha llegado la Guardia Urbana. La vigilante agredida ha sido asistida por el Sistema d'Emergències Mèdiques (SEM) y trasladada al hospital; afortunadamente, las heridas no eran graves y ella misma ha podido salir del centro e ir a denunciar los hechos por su propio pie.
Problemas recurrentes en los lavabos
El hombre ha sido detenido por agentes de la Guardia Urbana, y se le acusa de una agresión sexual. No es la primera queja que se recibe estos últimos días sobre un hombre que entra a grabar con el móvil en los lavabos del Mercat Central, poniendo la mano y el dispositivo por debajo de la puerta, y ahora los policías buscan comprobar si el agresor detenido hoy es también quien está detrás de estos otros altercados.