El famoso Triángulo de las Bermudas, conocido como el "cementerio del Atlántico" por los naufragios de barcos en la zona, tiene su homólogo terrestre en España: el Triángulo de la Pantaloneta. Este área ubicada entre los municipios riojanos de Bañares, Posadas y Nestares ya se ha convertido en un pozo en el que caen, accidentalmente, decenas de camioneros cada año en busca de una gasolinera fantasma por las sinuosas carreteras de las aldeas de San Millán y Ezcaray. Todo ello se debe a que existe un error del GPS, que indica que hay un área de repostaje cuando, en realidad, se encuentra a 600 kilómetros de distancia. Este martes se ha cobrado una nueva víctima.

 

La mayoría de los camiones que acaban sucumbiendo en este cementerio automovilístico riojano suelen tener al volante a conductores de Europa del Este. Este fenómeno es también peculiar, aunque no ha sido analizado a fondo, podría deberse a la lejanía y el poco conocimiento de la zona en la que realizan el transporte, a miles de kilómetros de las sedes de las empresas de logística. Aun así, el Gobierno de La Rioja alerta a los camioneros en varios idiomas de que la carretera por la que circulan no tiene salida. Pero este martes, un camionero de origen ucraniano ha sucumbido al Triángulo de la Pantaloneta.

Nueva víctima: un camionero de origen ucraniano

La víctima, a la que el GPS le ha jugado una mala pasada, ha necesitado ser auxiliado por la Guardia Civil. Conducía un camión de una empresa polaca y ha quedado encallado en una de las sinuosas carreteras que atraviesan el denso bosque de Ezcaray. Según apunta el digital nuevecuatrouno, el alcalde de Ezcaray, Diego Bengoa, ha sido el que puso los hechos en conocimiento de los agentes del Instituto Armado, después que un vecino le alertara que había volcado un camión en la zona. Los policías se han trasladado este mediodía para auxiliar al conductor y realizar las labores necesarias para desatascar el camión naufragado en tierra firme.

Para comunicarse con el camioner accidentado, necesitaron la ayuda del traductor del móvil, hasta que pudo llegar un vecino de Ezcaray de origen ruso que pudo comunicarse con el ucraniano, según explica el medio citado. El vehículo se dirigía hacia el paso fronterizo de La Jonquera (Girona) y el GPS le recomendaba repostar en la gasolinera fantasma que nunca llegó a aparecer y quedó encallado en pleno bosque. La Guardia Civil ha estado este martes realizando todas las labores de rescate y auxilio correspondientes en la zona del accidente.