El hombre de 34 años y nacionalidad española detenido como presunto autor del asesinato de Mohamed, un niño de 8 años, en Ceuta, ha confesado el crimen. No obstante, la extraña forma de asumirlo ha hecho que la investigación todavía no se haya dado por cerrada. El caso continúa bajo secreto de sumario. Según ha adelantado La Sexta, el acusado dijo primeramente a los agentes que se encontró con el chico, fue con él y discutieron, pero que perdió la vida accidentalmente. Asimismo, también negó en todo momento haber abusado del menor, cosa que tampoco pudo ser confirmada por el examen forense. Sin embargo, ahora se habría reconocido como culpable después que su versión anterior no acabara de convencer a la Policía Nacional.
El arrestado tiene antecedentes policiales por agresión sexual y robos con intimidaciones. Según informan fuentes próximas a la investigación a EFE, el hombre ha reconocido en dependencias policiales su culpabilidad, aunque todavía no ha trascendido si podía haber intervenido alguna persona más en la muerte del niño. La autopsia desmontó la coartada del asesino, al revelar que el menor había muerto de forma no accidental, siendo necesaria la intervención de dos forenses para recoger los restos del cuerpo del niño, que fueron enviados a Madrid para su análisis.
No tenían ninguna relación
El cuerpo sin vida del niño Mohamed Abdeselam, de 8 años, fue localizado a primeras horas de la mañana del pasado 19 de diciembre en un terraplén próximo en su vivienda particular con varias heridas, rodeada de basura, en la barriada de Loma Colmenar de Ceuta. Cursaba tercero de Primaria en el colegio Severo Ochoa y tenía dos hermanos de 18 y 21 años y una hermana de 14. La misma madrugada del día que apareció el cadáver, la familia presentó una denuncia ante la Jefatura Superior de Policía por la desaparición del menor, que salió de casa para jugar un partido de fútbol con unos amigos.
Los investigadores alertaron que no encontraban ninguna relación entre la víctima y el detenido. No obstante, la Policía Nacional, a través de la Policía Científica, ha mantenido varias líneas de trabajo sin descartar ninguna hipótesis sobre la muerte del niño. El hombre fue arrestado este miércoles al mediodía cuando salió de su domicilio a la barriada de Los Rosales de Ceuta, próxima al lugar donde encontraron el cadáver. Ahora ha confesado el crimen, según las fuentes citadas, y pasará a disposición judicial en las próximas horas.