Erinia es una de las víctimas de Jorge Ignacio Palma, el asesino de mujeres en serie que mató a Marta Calvo y a otras dos chicas. Han salido a la luz sus declaraciones después del juicio y su reacción cuando supo que el hombre que la había intentado matar era el asesino de Marta. Ha explicado con todo tipo de detalles el terror que sintió por dos motivos: que la matara y que nadie la creyera, sin embargo, afortunadamente, se ha hecho justicia.

Erinia es el nombre ficticio de la víctima, que es una mujer que se ha visto obligada a prostituirse. Según explica Caso Abierto, cuando era menor de edad la echaron de casa, se quedó embarazada y la única alternativa que tenía para conseguir dinero para cuidar a su hija era el mundo de la prostitución.

Marta Calvo / Archivo
Marta Calvo / Archivo

Jorge Ignacio Palma, el asesino de mujeres en serie, siempre escogía víctimas en situación de prostitución para matarlas o intentar matarlas, ya que era muy complicado demostrar las atrocidades que les hacía. El modus operandi de este narcotraficante era siempre el mismo, contactaba con sus víctimas y les proponía hacer una fiesta blanca, que consiste en mantener relaciones con cocaína.

Jorge Ignacio Palma introducía piedras en los genitales de las víctimas

Erninia explica que no es extraño que los puteros pidan estas propuestas, pero que lo que hacía Jorge Ignacio no era una fiesta blanca, sino que les introducida piedras de cocaína pura por los genitales. Tal como dice ella misma en la entrevista, a pesar de los años que hace que está atrapada a la prostitución, nunca había visto a un putero como Jorge Ignacio Palma.

Quedó con él en tres ocasiones diferentes. La primera vez no pasó nada fuera de la normalidad. En la segunda ocasión, le pidió de manera muy insistente que consumiera la droga, pero ella se negó, hecho que enfadó al asesino y que se marchó de muy malas maneras. El tercer encuentro fue el último, ya que Jorge Ignacio traspasó todos los límites: le puso una piedra de cocaína en la vagina sin su consentimiento.

"Salí corriendo mediodesnuda pidiendo ayuda y gritando por la ventana"

"Le dije que no lo hiciera más y se hizo el loco. Al momento me lo volvió a hacer y me asusté. Salí corriendo mediodesnuda pidiendo ayuda y gritando por la ventana. Yo cada vez estaba más mareada, pero él no hacía nada, me miraba con indiferencia desde la pared", explica la víctima a Caso Abierto.

Erninia consiguió huir y fue entonces cuando Jorge la empezó a perseguir, hasta que se encontró con un amigo de ella. El asesino los insultó y los amenazó y, desde entonces, la vida de Erninia cambió radicalmente: muerta de miedo, se cambió el teléfono y dejó de "trabajar" en el mundo de la prostitución por miedo a volver a encontrarse con él o con un putero similar.

Asesinato y la desaparición de Marta Calvo

"Cuando vi la foto del Jorge vinculado con el asesinato y la desaparición de Marta Calvo, me quedé de piedra. Fue entonces cuando me di cuenta de que me había intentado matar", concluye la víctima, que se vio con el asesino días antes de que matara a Marta Calvo.