La empresa Insertega Recycling se dedica a darle una nueva vida a la ropa que ya no utilizan grandes compañías como Ikea, Mango o el grupo Inditex. Este proceso tiene como origen el polígono de Pocomaco en A Coruña y finaliza en el municipio barcelonés de Mataró.
Esta compañía se aprovecha de la ropa que iba a ir al vertedero para darle una nueva vida, convirtiéndola en nuevas prendas. De esta forma la inversión en la materia prima es menor y aumentan su valor después de un elaborado trabajo de producción.
Juan Mejide, uno de los fundadores de Insertega Recycling, comenta que son pioneros en esta práctica: "Somos la única empresa de Europa que consigue terminar el círculo. Entregar una prenda acabada, que es capaz de transformar tu residuo en un producto. Estamos hablando de ropa, pero podemos hacer relleno de cojines, cortinas para probadores con tejanos reciclados, bolsas de trajes con algodón reciclado... Hay muchas cosas que se pueden hacer", dijo Meijde a los compañeros de La Voz de Galicia.
Los pasos a seguir
La empresa contactó con Ikea para hacer una prueba y demostrarle a la compañía sueca que su idea podía ser buena para ambas partes. "Les gustó y ahora vienen tráileres todas las semanas", cuenta Mejide.
En Insertega Recycling no reciben únicamente ropa, al tener clientes de sectores muy diferentes les llega de todo. Cuando los materiales en su planta lo primero que hacen es deshacerse de lo que no van a utilizar, que supone cerca de 30% de la materia prima. Descartan el plástico, botones, etiquetas, estampaciones y el cartón.
Deben adaptarse a las demandas del cliente por lo que seleccionan el producto que puede servir para satisfacerlas. Por ejemplo, si les piden hilo negro buscarán todas las piezas de ropa que lo tengan para poder extraerlo y, posteriormente, venderlo.
La labor de Insertega Recycling es conjunta y la otra empresa implicada es la entidad catalana Colibrí, que comenzó trabajando como proveedor de Inditex y ahora colabora para darle una nueva vida a prendas que se iban a tirar a la basura. En Mataró se termina de construir el tejido solicitado y ya está listo para ser enviado al cliente.
Las exigencias de las empresas
Desde Insertega Recycling se adaptan a las diferentes demandas de los clientes. Algunos piden prendas recicladas como Mango, Ikea suele pedirles hijo e Inditex ambas cosas. Cuenta Mejide cómo transformaron una camisa de Pull & Bear en bolsas para Zara en Japón: "A finales de mes les entregamos 60.000 bolsas, el mes que viene 120.000, y a partir de ahí exponencialmente todos los meses 200.000".
Cuenta también que cuando las empresas les contactan les piden que gestionen sus residuos. Desde Insertega Recycling les comentan que no se encargan únicamente de eso y que pueden ofrecer nuevas prendas o materiales para que se vuelvan a utilizar.
La empresa lleva casi un año y medio activa y llevan cerca de mil toneladas trabajadas. Además parece que su crecimiento será aún más grande. Mejide cuenta que su idea es abrir una nueva planta en Catalunya: "Vamos a montar otra planta en Tordera para dar servicio a todo el núcleo textil que hay allí: Oysho, Bershka, Lefties, entre otros. Queremos replicar parte de esta planta allí, pero sin perder la esencia social".
¿Qué tipo de prendas llegan a la planta?
Cada día reciben muchas prendas para que se traten posteriormente. Hay varias razones por las que las compañías grandes como Zara o Mango decidan desechar sus prendas y al trabajar con Insertega Recycling se pueden aprovechar en lugar de perder dinero tirándolas a la basura.
Los principales motivos por los que las grandes compañías desechan sus productos son los siguientes: taras, que tenga algún componente químico que no pase los controles, algún fallo en el tejido, por algún plagio, por incautaciones o por otros motivos que imposibilitan su venta.