Los Mossos d'Esquadra detuvieron el pasado 12 de febrero a dos hombres españoles de 39 y 56 años acusados de haber atracado una decena de supermercados de Barcelona y llevarse el contenido de las cajas registradoras amenazando a los trabajadores —al principio solo con violencia física, pero en los últimos tres robos utilizaron un cuchillo— llegando, incluso, a agredirlos en alguna ocasión si intentaban oponer resistencia. Actuaban por toda la ciudad, en concreto, en los distritos de Nou Barris, Horta, Sant Andreu, Gràcia y el Eixample y se enfrentan a cargos por robo con violencia y también por robo o hurto de uso de vehículo.
Los ladrones, como se supo posteriormente, convivían con una tercera persona, un hombre de 46 años que, a pesar de no estar relacionado con los saqueos de los supermercados, tenía seis órdenes de detención e ingreso en prisión vigentes por delitos similares, que también fue arrestado. Los sospechosos iban cubiertos con pasamontañas, capuchas y también llevaban guantes, pero sus incursiones quedaron grabadas por las cámaras de seguridad de los distintos establecimientos, lo que facilitó su identificación y consecuente detención.
Pillan a uno de ellos en pleno trabajo
La policía catalana pudo pillar a uno de los dos sospechosos momentos después de haber cometido el décimo de los robos de los que están acusados. A pesar de trabajar juntos la mayor parte del tiempo, a veces se repartían el trabajo y atracaban por separado. Su detención el pasado miércoles precipitó la localización de su colega de "profesión" y al día siguiente se hizo una entrada y registro en su domicilio, donde también encontraron objetos relacionados con los hechos y a la mencionada tercera persona. Entre los dos acumulan 45 antecedentes y pasaron a disposición judicial los días 14 y 15 de febrero.