Un niño de 6 años de Connecticut ha sido hospitalizado en estado grave con brutales quemaduras de segundo y tercer grado en la cara y las piernas después de que otro niño, de 8 años, le prendiese fuego intencionalmente, intentando quemarlo vivo. El agresor mojó una pelota de tenis con gasolina y le prendió fuego para después tirársela a la cara a la víctima, que sufrirá secuelas y cicatrices de la salvaje agresión de por vida.
Un niño de 8 años quema vivo a otro de 6
El pequeño, llamado Dominick Krankall, sobrevivió al ataque, pero estuvo entre la vida y la muerte a causa de las quemaduras. Su hermana Kayla ha abierto una campaña de recaudación de fondos en GoFundMe para el tratamiento de su hermano, en la que explica lo que le ha pasado al niño: "Mi hermano de seis años podría haber muerto. Un niño mojó una pelota con gasolina, le prendió fuego y se la tiró. Todo en cuestión de segundos", y remataba con un: "Va a quedar marcado de por vida mental y físicamente".
El ataque a Dominick tuvo lugar el pasado domingo, cuando el niño estaba jugando en el patio trasero de su casa en la avenida Louisiana de Bridgeport, en Connecticut, con un grupo de niños que, según se ha podido saber, eran vecinos del barrio. Su hermana detallaba también a NBC News que fue entonces cuando el niño de 8 años entró en un cobertizo de la casa y consiguió gasolina y un mechero y llamó a Dominick.
Entre la vida y la muerte y con secuelas de por vida
Cuando la víctima llegó, el agresor le tiró la pelota de tenis empapada en gasolina y en llamas a la cara y salió corriendo, mientras veía a Dominick arder. Pese a que las heridas mantuvieron a sanitarios y familia en vilo, John Cappiello, coordinador de relaciones con los medios del Bridgeport Hospital, le dijo al medio DailyMail.com este miércoles que el pequeño "se encontraba en progreso y evolucionaba". Por suerte, ha podido ser ingresado en el centro de lesiones por quemadura del hospital local, que es el único de la ciudad y uno de los 62 centros verificados en Estados Unidos.
Según NBC, los servicios de emergencias de Bridgeport emitieron un comunicado en el que detallaban que los informes preliminares indicaban que hasta cuatro niños fueron vistos sin supervisión adulta jugando con gasolina y prendiendo fuego a objetos.
Recaudación de fondos para cambiar de barrio: la madre del agresor lo niega
Los miembros de la familia han asegurado que esta no es la primera vez que el vecino agrede a Dominick, y un incidente anterior también lo llevó al hospital. De hecho, tiene un historial de intimidación bastante largo, pero su madre niega los hechos y asegura que "es una broma", denunciaba Kayla, la hermana de la víctima, al medio citado. "Aunque Dominick no puede hablar porque tiene mucho dolor y está todo hinchado, le dijo a mi madre: 'Por favor, no me lleves de vuelta allí'", aseguraba la joven.
Es por eso que ahora recaudan fondos para comprarse una nueva casa lejos del vecindario en el que ha sufrido el bullying, así como para el tratamiento, ya que las quemaduras le han desfigurado la cara y ha requerido mucho tiempo en el hospital. Hasta este miércoles, ya habían superado su objetivo de 50.000 dólares y recaudado 280.800.