El hombre que varios testigos vieron salir del edificio de la calle Princesa de Madrid donde poco después encontraron el cuerpo sin vida de una mujer en un piso prostíbulo, ha sido detenido por la Policía Nacional. El hombre, de 36 años y originario de Guinea Ecuatorial, fue pillado el pasado viernes cuando abandonaba una pensión de la calle Tirso Molina cargando con dos maletas. Todavía está por ver si quedará acusado de un delito de homicidio, ya que las causas de la muerte de la víctima, boliviana de 45 años, todavía no se han confirmado.

Lo que se sabe es que los forenses encontraron restos de drogas en la habitación donde encontraron el cadáver el pasado martes, que no presentaba signos evidentes de violencia, y el ahora detenido ha confesado que cuando visitó a la prostituta iba colocado y no se acuerda de nada. Los investigadores siguen esperando a recibir los resultados de las pruebas de toxicología practicadas al cadáver para poder determinar si la causa de la muerte fue una sobredosis que podría haber provocado la asfixia mecánica que, según se determinó en un primer momento, la acabó matando.

Le compró un bolso con una tarjeta robada

Algunas de las compañeras de la víctima explicaron a los agentes que el día anterior a su muerte había estado en compañía del hombre ahora detenido en un hotel del centro de Madrid y que este le compró un bolso de 600 euros, según ha adelantado el diario El Mundo. Con esta información, los investigadores revisaron las cámaras de seguridad del El Corte Inglés de Callao, que es donde hicieron la compra. En las imágenes se ve claramente al hombre pagando con una tarjeta de crédito que se ha podido demostrar que era sustraída.

La víctima, de 45 años, fue encontrada muerta en un piso prostíbulo de Madrid / Diego Radamés, Europa Press. 

Dentro de las maletas que llevaba el sospechoso en el momento de su arresto no se pudo encontrar la ropa con la que iba vestido el día de la muerte de la víctima y que se apreciaba en las cámaras de seguridad del edificio de la calle Princesa. Según el mencionado diario, el hombre confesó a los policías que lo tiró todo en un contenedor. Mientras llegan los resultados del laboratorio forense, el sospechoso ha pasado ya por disposición judicial. El caso está instruido por el Juzgado de Instrucción número 9 de Madrid, que no descarta pedir una segunda autopsia para aclarar cómo murió la víctima.