Agentes de los Mossos d'Esquadra de la Unidad de Investigación de la comisaría de Tarragona han detenido a dos hermanos, de 39 y 42 años, como presuntos narcotraficantes, después de ser denunciados por el propietario del piso que tenían alquilado en el barrio de Bonavista, a quién estaban amenazando para poner el inmueble a su nombre después de que descubriera que lo utilizaban para esconder más de 50 kilos de hachís. Los arrestos tuvieron lugar el pasado jueves por los delitos de tráfico de drogas y extorsión.
A mediados del año pasado, uno de los hermanos entró a vivir en el piso, alquilando una de las habitaciones. Al cabo de poco tiempo, el otro se unió a él, y empezaron a utilizar el piso como un punto de venta y almacenamiento de droga, principalmente de hachís, que distribuían al por menor entre algunos vecinos del barrio. Al darse cuenta de lo que pasaba, el propietario intentó poner fin al contrato, además porque los hombres habían dejado de pagar el alquiler, pero estos empezaron a amenazarlo con agredirlo si no los dejaba en paz.
Involucrado en el narcotráfico y extorsionado
Con el paso del tiempo, los hermanos comprometieron a la víctima, obligando al hombre a intervenir en el tráfico de las sustancias. Un día le pidieron que transportara parte del hachís que guardaban en el piso a otro sitio, pero, después de hacerlo, lo acusaron de haberse quedado con parte de la mercancía, que ellos aseguraban que sumaba 8.000 euros. Entonces fue cuando empezaron a extorsionarlo, con la excusa de que tenía que devolver de alguna manera la cantidad que supuestamente habían perdido, intentando que pusiera el piso al nombre de ellos.
Después de eso fue cuando el hombre se decidió a acudir a la policía, y denunció a los dos hermanos. La policía catalana pudo detener a los sospechosos el mismo día, y requisaron 50,5 kilos de droga, que tendría un valor de 400.000 euros.