Daniel Sancho por fin ha podido declarar en la causa que tenía abierta desde el 2021 por un delito de lesiones después de que se tuviera que anular la vista del pasado 7 de noviembre porque, según la Fiscalía de Tailandia, donde está en prisión preventiva desde el pasado agosto por haber matado y descuartizado, presuntamente, al cirujano colombiano Edwin Arrieta, no podía conectarse en videoconferencia. En concreto, Sancho estaba acusado de haber agredido a un hombre el año 2019 después de saltarse la cola para coger un taxi en Madrid. Según la denuncia de la víctima, el chef le dio un puñetazo y le rompió uno de los dientes.
Este miércoles se ha conectado telemáticamente con la Audiencia Provincial de Madrid, donde ha admitido los hechos sin excusas y ha llegado a un acuerdo con la víctima, según el cual solo tendrá que pagar una multa de 450 euros, unos cinco euros al día durante tres meses. Sancho contaba además con la atenuante de reparación del daño, ya que le ha pagado 2.100 euros al joven que agredió, según requería el fiscal en concepto de indemnización por las lesiones y las secuelas, y otro de dilaciones indebidas por el retraso del juicio.
Un juicio de pocos minutos
La conexión Tailandia - Madrid no ha durado mucho rato. El Fiscal ha expuesto los hechos ocurridos la madrugada del 9 de noviembre del 2019. "Daniel Sancho se encontraba en los alrededores de la calle José Abascal cuando, en un momento determinado, procedió a introducirse en un vehículo taxi que allí se encontraba. Sin respetar la cola que se había formado para utilizar el servicio público, fue recriminado por la víctima. Con el ánimo de herir, procedió a darle un puñetazo en la cabeza provocándole lesiones que tardaron en curarse doce días".
A todo eso, Sancho ha respondido con uno contundente "sí", reconociendo el incidente. Cuando le han preguntado si entendía la condena: "Perfectamente". Por su parte, la víctima no ha testificado durante la vista conforme al acuerdo previo.