Lida tenía 39 años y compartía piso con su verdugo, Daniel, un hombre de 34 años, de la misma nacionalidad que ella, de Honduras, y un bebé, hija de los dos, una niña de dos años, que en el momento que Daniel la atacó mortalmente también era en casa. En el mismo piso, en la calle de Cornellà Modern, en el barrio del Febró, también había dos primas de la víctima, que también fueron agredidas. Un familiar de Lida explica cómo fue la pelea que acabó con seis cuchilladas y Lida asesinada, delante de su hija y de sus primas. Este joven, que quiere evitar ser identificado, también explica qué tipo de presión y maltratos el presunto asesino, quien pinta como un hombre de "doble cara", infligía a la chica.
La investigación policial tiene poca complicación. Cuando los Mossos llegaron al lugar de los hechos pudieron arrestar al hombre, que ha pasado la noche en la comisaría de Cornellà y este martes está previsto que pase a disposición judicial. El aviso al 112 lo dieron las hermanas de la víctima, que también avisaron a otros familiares, pero a pesar de los esfuerzos de los técnicos del Sistema de Emergencias Médicas (SEM) y de los Mossos, nada pudo salvar la vida de la mujer. Lida tenía heridas por todo el cuerpo y una muy grave en la zona de la clavícula.
La obligó a cambiar la manera de vestir
El familiar de Lida explica que si bien delante de ellos nunca habían detectado enfrentamientos entre la pareja y que tampoco había ninguna denuncia por maltratos entre la pareja, sí que otras personas habían visto problemas entre ellos dos. "Tenía una doble cara", asegura este familiar, sobrino de la mujer asesinada. El sábado por la noche él estuvo en casa de la pareja, donde también vivían dos primas suyas, después de un concierto donde habían ido todos menos Daniel. El agresor, aquella noche, le había enviado un mensaje a Lida recriminándole que hubiera salido de casa para ir al parque y después al concierto, un hecho, asegura este familiar, que podría ser lo que desencadenó la agresión mortal de madrugada.
En este perfil de persona de "doble cara" también se puede entender por como trataba a Lida, más allá de agresiones físicas. Los últimos meses, por presión de él, con violencia psicológica, la chica "había cambiado completamente su manera de vestir", asegura este familiar, explicando que la chica asesinada vestía con pantalones cortos y vestidos, pero que él la hizo vestir más discreta, con pantalones más largos y camisetas. A pesar de estos síntomas, ella nunca pidió ayuda y ellos tampoco le ofrecieron, sin esperar, aseguran, que pudiera acabar de esta manera trágica.
Las primas, agredidas
La pareja vivía en este piso de la calle de Cornellà Modern con dos familiares más, que también fueron agredidas por Daniel. Las dos, cuando oyeron la pelea, y siempre según la versión de este familiar, intentaron detener la agresión, pero el hombre también las atacó, hiriéndolas a ellas. Una de las primas llegó a poder coger del brazo al presunto asesino, pero él se pudo deshacer de ella, le dio un fuerte golpe y después clavó un navajazo en la zona del cuello a Lida, que cayó al suelo entre un charco de sangre. Las dos chicas, más jóvenes que la víctima, están heridas leves y no se sufre por su vida, pero están en estado de choque.