Una resolución esperada. La titular del juzgado de instrucción 15 de Barcelona ha dictado el procesamiento del futbolista Dani Alves por un delito de agresión sexual con acceso carnal a una chica en la discoteca Sutton de Barcelona el diciembre pasado, al dar por cerrada la investigación. Eso significa que el exfutbolista del Barça, que está en prisión preventiva desde el 20 de enero pasado, queda a un paso de juicio, que se hará en la Audiencia de Barcelona. La magistrada Concepción Cantón ha citado al futbolista el próximo día 2 de agosto a las 12.30 horas en el juzgado para realizar la declaración indagatoria, un trámite en la investigación de sumario en la que se le pregunta si quiere añadir algo más o pedir una prueba y al final se anuncia su procesamiento. La juez mantiene en prisión provisional a Alves y fija la fianza de responsabilidad civil en 150.000 euros.
Ahora la Fiscalía y la acusación particular, ejercida por la chica de 22 años, tendrán que presentar el escrito de acusación y las penas que solicitan para el brasileño, y sus abogados, el escrito de defensa. El delito de agresión sexual es castigado hasta 12 años de prisión. La celebración del juicio podría ser a finales de año o principios del próximo.
La defensa de Dani Alves, ejercida por los penalistas Cristóbal Martell y Arnau Xumetra, ha pedido a la magistrada que no demorara la resolución de su procesamiento a fin de que el juicio se celebre lo más rápido posible, e intentar sacarlo de la prisión Brians 2, donde está encerrado desde hace medio año. Las causas con preso son prioritarias, aunque actualmente los tribunales de la Audiencia de Barcelona registran bastantes meses de retraso para señalar vistas, hecho que ha obligado a poner salas de refuerzo en las secciones penales. La Audiencia de Barcelona denegó dos veces poner en libertad al brasileño antes de la celebración del juicio, sobre todo por el riesgo de fuga y la gravedad del delito que se le imputa.
Riesgo de huida
En concreto, la sección 3.ª de la Audiencia de Barcelona desestimó, el junio pasado, poner en libertad al futbolista Dani Alves al afirmar que el riesgo de fuga continúa y porque "ninguna otra medida cautelar puede neutralizar con suficientes garantías este riesgo, y su huida impediría la celebración del juicio, que requiere la presencia del acusado". La defensa de Dani Alves, insistió, en la segunda vista, que no había riesgo de huida, que el exfutbolista del Barça se quiere defender, que tiene arraigo en Barcelona, donde sus hijos vendrán a estudiar el próximo curso. El tribunal no tardó ni un día para responder y, en una resolución muy crítica, mostró su negativa a dejar al brasileño en libertad.
El consentimiento
El futbolista, en su cuarta versión, aseguró que fueron relaciones sexuales consentidas, en el pequeño lavabo de la discoteca, y que no dijo la verdad en la primera comparecencia judicial para escondérselo a su mujer. La abogada de la denunciante, Ester Garcia, y la Fiscalía se opusieron a la puesta en libertad del brasileño porque la chica ha mantenido siempre que fue sexo sin consentimiento.
Un posicionamiento compartido por la Audiencia de Barcelona. El tribunal, con la magistrada Carme Gil de ponente, afirmó que "hay indicios fundados" sobre la autoría de Dani Alves en la agresión sexual no consentida. El tribunal también rechazó la tesis del jugador de que fueron relaciones consentidas porque previamente estuvieron bailando y flirteando. "Aunque se tratara de un típico cortejo sexual entre dos adultos, como afirma la defensa, en ningún caso puede justificar una posterior agresión sexual", concluyó la sala.
De la instrucción, solo quedaba realitzar la exploración de la víctima para detallar sus posibles secuelas, que se permitió hacer de forma conjunta entre el perito del juzgado y el de la defensa. Y, una vez completada, la magistrada Concepción Cantón, finalmente, ha cerrado la investigación a Dani Alves y lo envía a juicio.