Jordi Magentí, el principal sospechoso del doble crimen de Susqueda, vuelve al banquillo de los acusados gracias a la investigación policial de este macabro crimen, han descubierto su presunta implicación en otro delito: el narcotráfico, motivo por el cual se podría enfrentar a una pena de hasta tres años de prisión y una multa de 60.000 euros.
Jordi Magentí, el eterno sospechoso del asesinato de Marc y Paula en el pantano de Susqueda, vuelve a ser juzgado, en este caso, por tráfico de marihuana. Su hijo también está acusado en este caso y el juicio se ha iniciado gracias a la investigación de los Mossos d'Esquadra por el doble crimen. Los agentes instalaron micrófonos en casa de los sospechosos para saber si tenía algo que ver con los asesinatos, y descubrieron que, presuntamente, él y su hijo estaban implicados en otro delito: el tráfico de drogas.
Entradas y registros en casa de Jordi Magentí y su hijo
Por esta conversación, hicieron entradas y registros en casa de los sospechosos. En el domicilio de Jordi Magentí, situado en Anglès (Girona), encontraron diferentes herramientas y elementos relacionados con el cultivo de marihuana. En todo eso se le tiene que sumar que el hijo de Magentí le dijo que tenía cuatro kilos de marihuana en un piso de Salt (Girona) y que gracias a la plantación, podrían conseguir 500 euros por cabeza. No obstante, se han defendido diciendo que estas plantas eran por autoconsumo.
Un mosso asegura que Magentí le dijo que era el propietario de una plantación de marihuana en Susqueda
Por si no fuera poco, en el marco de la investigación del crimen del Pantano, Magentí defendió su inocencia en los asesinatos, pero explicó en los agentes que tenía una plantación de marihuana, unos hechos que ahora también niega y que, según su abogado, no se pueden demostrar.
Jordi Magentí, el principal sospechoso del doble crimen de Susqueda, podría entrar en la prisión por otro delito: él y su hijo están acusados de tráfico de marihuana / Cedida
Fiscalía pide tres años de prisión y 60.000 euros de multa
Según explica el abogado de la familia Magentí, no hay ninguna prueba directa que los incrimine en este delito y, por este mismo motivo, pide la absolución. Por otra parte, Fiscalía pide para cada uno de ellos una pena de tres años de prisión y una multa de 60.000 euros.
Jordi Magentí se ha acogido al derecho a no declarar y su hijo ha contestado solo las preguntas que le ha hecho su abogado, que asegura que estas acusaciones son fruto de una mala investigación basada en los prejuicios que hay hacia Magentí por su presunta implicación en el asesinato de Marc y Paula.