Salen a la luz más detalles del macabro crimen de Cristina, una joven de 26 años que mató un vecino de Castelldefels (Barcelona) en Cortegada (Ourense). Víctima y asesina se conocieron a través de una aplicación de citas y el hombre fue a verla a Galicia y, de repente, empezaron a discutir por una cafetera y ella lo mató.
Los hechos se remontan al mes de agosto del año pasado cuando José María, un vecino de Castelldefels de 53 años, conoció a Cristina, una chica de 26, a través de una aplicación de citas por internet. José María estaba jubilado de manera anticipada, ya que tenía una discapacidad y, después de 10 días hablando con su futura asesina, decidió irla a ver a Cortegada, un pequeño municipio cerca de Ourense.
José María estaba enamorado de su asesina
El 18 de febrero se desvirtualizaron y se vieron en persona, la víctima se quedó a dormir en casa Cristina. Según su relato, la convivencia no fue como esperaban, ya que él se pasaba el día jugando a la Play y era una persona muy posesiva. Así pues, según la versión de la presunta asesina, ella se fue desenamorando de él, pero José María cada vez estaba más enamorado de ella.
Aunque la joven de 26 años le pidió en varias ocasiones que se fuera de casa, él no lo hizo y, fue entonces cuando la conversación se fue calentando y, según explica Caso Abierto, el detonante de este macabro crimen fue una discusión por la compra de una cafetera.
Cristina Rodriguez Veloso
Fue entonces cuando Cristina Rodriguez Veloso, presuntamente, lo drogó poniéndole tranquilizantes en el café y, posteriormente, lo mató asfixiándolo con un cojín. El cuerpo de José María estuvo hasta cinco días en el interior de casa de la asesina. Acto seguido, descuartizó su cuerpo, lo quemó y escondió sus restos en diferentes puntos de los alrededores de su casa.
Investigación en manos de la Guardia Civil
La familia de José María se empezó a preocupar, ya que los días iban pasando y no tenían noticias de él. Por este mismo motivo, pusieron una denuncia por desaparición a los Mossos d'Esquadra, aunque la investigación acabó en manos de la Guardia Civil, ya que su última pista era fuera de Catalunya.
La presunta autora de los hechos está ingresada en la prisión de manera provisional
Meses más tarde, Cristina confesó a su psiquiatra que un hombre había muerto en su casa y que, asustada, se había deshecho de su cadáver. Aunque en un primer momento dijo que ella no era la autora de los hechos, más tarde acabó confesando el crimen. Actualmente, está ingresada en la cárcel de manera provisional y sin fianza como presunta autora de los hechos.