La policía nacional española ha detenido en Empuriabrava, en el Alt Empordà, un hombre de 39 años y de nacionalidad marroquí que estaba en busca y captura por Francia por su relación con el tráfico de drogas y el crimen organizado de las mafias marsellesas. El hombre tenía un piso, donde residía, en este municipio del norte del país, y donde pudo ser localizado por el grupo de fugitivos de la Policía Nacional después de recibir la orden de detención europea por parte de las autoridades francesas.

Fue el pasado mes de febrero cuando la policía española recibió el aviso que el hombre podía estar en Catalunya, e iniciaron la investigación con el fin de poder ubicarlo. No fue complicado. El hombre tenía un piso en Empuriabrava, que utilizaba como piso franco para estar fuera de Francia, confiando en que no sería detectado ni detenido. Es habitual que muchas de estas personas que tienen que huir del estado vecino después de ser detectados por la policía, encuentren en Catalunya un lugar para esconderse, hasta que son cazados por la policía española o los Mossos d'Esquadra.

A prisión esperando ser extraditado a Francia

La investigación, desde que fue ubicado, se centró en vigilarlo con el fin de poder saber y confirmar que era él y también poder localizar dónde se escondía, con un equipo conjunto entre los agentes de la comisaría de Figueres, de la Policía Judicial de Girona y también el Grupo de Fugitivos de Barcelona, a especialistas en detectar y detener este tipo de fugitivos. El hombre ha sido detenido y entregado al juez de guardia de Figueres, que de manera coordinada con la Audiencia Nacional, sobre quien recae la competencia sobre detenciones internacionales, lo ha enviado a la prisión de Puig de las Bases a la espera de ser extraditado en Francia, donde lo buscan por tráfico de drogas y por su relación con las mafias marsellesas.