La suerte estuvo de su parte. Un vecino del estado de Illinois, en los Estados Unidos, decidió comprar un boleto de la lotería Mega Millions en una gasolinera de la localidad de Des Plaines sin saber que sería el afortunado de llevarse uno de los premios más astronómicos del país: 1.280 millones de dólares es la increíble cifra que ha ganado al hombre estadounidense. Esta cantidad es el tercer premio más grande que se ha repartido nunca en la historia de la lotería de los Estados Unidos.
Un caso inédito en la lotería de los Estados Unidos
El sorteo se llevó a cabo el pasado viernes por la noche, en horario norteamericano, y ya se ha sabido el resultado. Los funcionarios han confirmado que es un caso inédito, ya que sólo hay una única persona premiada. La probabilidad de ganar el gran botín era ínfima: una entre 302,5 millones. Según fuentes de la empresa que gestiona la lotería, el ganador tiene la opción de recibir los 1.280 millones de dólares de manera fraccionada —en 30 pagos anuales durante 29 años— o bien en un solo pago en efectivo. La cifra final será menor porque se le aplicará una retención de impuestos.
¿Cómo funciona el sorteo?
Según explica la página web de la lotería, los números ganadores fueron el 13, 36, 45, 57 y 67, y la Mega Ball era el número 14. Cada sorteo consta de seis bolas. Los jugadores compran los boletos en que tienen que escoger cinco números del 1 al 70, que están representados por bolas blancas. Además, también añaden un número del 1 al 25, que se llama Mega Ball dorada, el gran premio. La persona que acierta los seis dígitos se lleva el premio más alto o jackpot. Si dos o más personas los aciertan todos, el importe se reparte. La particularidad es que esta cifra es acumulativa: se va hinchando a medida que nadie acierta las seis cifras.
El botín iba aumentando día a día
En este caso, la cifra premiada es astronómica porque, precisamente, nunca nadie había acertado los dígitos. De hecho, en un principio el premio estimado era de 747 millones de dólares, pero desde el 15 de abril ninguno de los boletos vendidos tenía los seis números ganadores, por lo cual, la cifra aumentó hasta más de mil millones de dólares. Ahora sólo queda esperar para ver qué decide hacer el nuevo multimillonario norteamericano, del cual se desconoce la identidad.
Estafas a través de la lotería
Este caso no se trata de una estafa, pero ciertamente, los delincuentes aprovechan estos sorteos para poder estafar a personas, sobre todo personas mayores vulnerables. Se denomina la estafa del 'tocomotxo'. Los estafadores buscan víctimas potenciales y las engañan haciendo creer que un joven ha ganado un premio de la lotería y lo quiere compartir. Uno de los delincuentes exige a la víctima que aporte una cantidad de dinero en metálico argumentando que es la manera de fiarse. Otro miembro de los estafadores se hace pasar por un ciudadano interesado en el premio y simula dar dinero para hacerlo más creíble y hacer que la víctima pique. En este sentido, la persona acaba extrayendo de un cajero automático uno grande cantidad de dinero, pero, una vez entregados, los estafadores escapan.