Colin Farrell es uno de los actores más populares de Hollywood, el irlandés tiene una carrera envidiable. Ha actuado en series de televisión icónicas como Scrubs o True Detective, pero su fama se la debe a su trabajo en la industria del cine en films como S.W.A.T, Alexander o Animales fantásticos y dónde encontrarlos. Ha tenido grandes problemas de adicción, pero el nacimiento de su primer hijo le hizo cambiar.
Su trabajo ha sido reconocido por el público y ha ganado algunos premios importantes por su capacidad de interpretación. El galardón más destacado de su carrera lo ganó en 2009 cuando le entregaron el Globo de Oro a mejor actor en comedia o musical por su papel en In Bruges.
Durante muchos años tuvo fama de ser uno de los 'chicos malos' de Hollywood, era muy frecuente ver a Farrell en fiestas o bajo los efectos de las drogas. Además, fue noticia en varias ocasiones por sus muchas relaciones amorosas. Entre sus exparejas destacan la actriz Angelina Jolie y la heredera Paris Hilton.
Las sustancias que consumía Farrell
Farrell tuvo graves problemas de adicción. El actor irlandés llegó a enumerar la cantidad de sustancias que consumía semanalmente, lo hizo en una entrevista en Radio Times: 20 pastillas de éxtasis, seis gramos de speed, cuatro de cocaína, 15 de hachís, tres botellas de whisky, 12 de vino, 30 litros de cerveza y 280 cigarrillos.
Se trata de una cantidad de sustancias indecente, Farrell no podía aguantar mucho tiempo llevando ese ritmo de vida tan desenfrenado. Cuenta que cuando se trasladó a Estados Unidos la fama le llegó rápidamente, el mundo de la noche en Hollywood es peligroso y terminó siendo adicto a varias drogas diferentes.
Farrell firmando autógrafos / Europa Press
Era frecuente que Farrell hablara sobre sus problemas de adicción con los medios de comunicación. Pese a ello, sus actos le habían convertido en un estereotipo y gran parte del público dejó de tomar su trabajo en serio. El irlandés llegó a comentar que por el consumo excesivo de drogas no recuerda algunas etapas de su vida con claridad.
El cambio en su vida
Colin Farrell tuvo a su primer hijo en 2003 con la modelo Kim Bordenave. Este acontecimiento hizo que Farrell decidiera dar un cambio en su vida, aunque no fue inmediato, tardó unos dos años en desintoxicarse y comenzar a ejercer su papel de padre.
Su hijo, James Padraig, padece el síndrome de Angelman, un trastorno genético que provoca retraso en el desarrollo físico y mental. También afecta al equilibrio y el habla.
Su imagen de 'chico malo' le ayudó para conseguir algunos papeles, pero su ritmo de vida era insostenible. El actor comentó esta etapa de su vida en The Daily Telegraph: "Se creó una energía y un personaje que me beneficiaron. Después, hubo una etapa en la que todo eso empezó a desmoronarse a mi alrededor".
Actualmente lleva más de 15 años sin consumir drogas, el propio actor cuenta que los hábitos saludables y el yoga han sido claves para su cambio radical.