Un chico de 15 años fue detenido el pasado 8 de marzo acusado de una agresión sexual a una menor de edad en Esparreguera (Baix Llobregat). La víctima, de solo 13 años, asistía al mismo centro de refuerzo educativo que el arrestado, y los dos mantenían una relación de amistad. La presunta violación tuvo lugar en la habitación del adolescente, después de que la niña fuera a su casa, pensándose que encontraría a más amigas.
La madre denunció al día siguiente de la presunta violación
Según el relato de la menor, que ha avanzado El Periódico, la agresión tuvo lugar el domingo 5 de marzo. La niña le pidió permiso a su madre para ir a casa del detenido, diciendo que allí se reuniría con más amigas. Sin embargo, al llegar se encontró con que solo estaban ella y el chico. El acusado la llevó a su habitación y la convenció para grabar un video mientras se daban un beso. La niña accedió, pero el chico aprovechó el momento para agredirla.
Al día siguiente, la psicopedagoga del instituto donde está escolarizada la víctima llamó a la madre de esta para decirle que su hija había tenido relaciones sexuales sin protección. Después de recogerla en la escuela, la madre la llevó a un centro médico para que se tomara la pastilla anticonceptiva, y durante el trayecto, la niña expresó en repetidas ocasiones que ella no quería mantener relaciones con el chico y que este se aprovechó de ella.
Después de tomarse la pastilla, la niña fue trasladada al Hospital Sant Joan de Déu de Barcelona, donde la examinaron, y la madre denunció formalmente al chico ante los Mossos d'Esquadra de la comisaría de Martorell.
En libertad vigilada
El acusado declaró ante la Fiscalía de Menores el pasado 9 de marzo. El juez decretó la libertad vigilada para el adolescente, así como la prohibición de acercarse a la víctima a menos de 250 metros. Para poder garantizar el cumplimiento de esta medida, fuentes del centro de refuerzo al cual acuden los dos menores han asegurado que han cambiado el horario del presunto agresor para evitar que coincida con la víctima.
Por su parte, el abogado que representa a la menor agredida solicitó para el acusado el ingreso en un centro de régimen cerrado, y se prevé que recurra la sentencia del magistrado. Mientras tanto, los Mossos d'Esquadra tienen una investigación abierta, tanto por el delito de agresión sexual como por la difusión del vídeo en el cual ambos menores aparecen besándose.