Agentes de paisano de la Unitat de Platges de la Guàrdia Urbana de Barcelona cazaron el pasado lunes a un matrimonio que acumulaba casi un centenar de objetos robados por un valor aproximado de 12.000 euros. La pareja los tenía guardados a su furgoneta divididos en maletas según la categoría de producto. Los dos investigados tenían antecedentes previos por otros delitos de robo que habían cometido anteriormente.
Los hechos tuvieron lugar durante la tarde del lunes, hacia las seis, en la playa del Bogatell, cuando, mientras los agentes de paisano hacían a un servicio de control rutinario, vieron una furgoneta blanca sospechosa, que circulaba muy lentamente y que prestaba mucha atención a los vehículos aparcados cerca. Al ver esta actitud, los policías se acercaron al vehículo y le pidieron que parara, pero el conductor de la furgoneta hizo justamente lo contrario y, al recibir la orden, aceleró e intentó huir. Otra patrulla que se encontraba cerca localizó a los fugitivos unas calles más adelante, consiguió interceptar el vehículo y cerrar el paso en la furgoneta.
12.000 euros en objetos robados
Los agentes identificaron a los dos ocupantes y descubrieron que los dos tenían antecedentes previos por delitos contra el patrimonio, y ella también había cometido robos con fuerza. Además, según adelanta Antena 3, el conductor iba bebido y no tenía permiso de conducir. Cuando los policías abrieron la parte posterior de la furgoneta, encontraron una bolsa con herramientas y doce maletas y mochilas que estaban cuidadosamente ordenadas y clasificadas según la categoría de los objetos que había dentro.
Después de abrirlas y hacer el recuento, constataron que había más de 90 objetos robados, entre los cuales se encontraban relojes, teléfonos móviles, altavoces, bolsos de mano e, incluso, una nevera portátil, un horno portátil y un ventilador. En total, los objetos sustraídos tenían un valor aproximado de 12.000 euros. La Guardia Urbana los investiga por un delito de receptación, es decir, de posesión de objetos robados, y de otro delito contra la seguridad del tráfico. La furgoneta fue trasladada a un depósito municipal.