Un nuevo carril para conducir borracho por la A-2 en Lleida, una parada para comer y una pequeña persecución a pie en Bellpuig (Lleida) antes de ser detenido. Esto es lo que, a grandes rasgos, sucedió este lunes, 14 de abril, alrededor de las cuatro y media de la tarde, cuando varios conductores alertaron de que un camión circulaba temerariamente por la mencionada autovía. De hecho, como se puede observar en el vídeo, iba invadiendo reiteradamente el arcén, como si se tratara de otro carril, sin respetar las distancias de seguridad con los otros vehículos y, por lo tanto, poniendo en grave peligro su integridad y la del resto.
Por todo ello, los Mossos d'Esquadra del Área Regional de Tráfico (ART), una vez tuvieron conocimiento de los hechos por los diferentes avisos de los usuarios de la autovía, iniciaron la búsqueda del conductor del camión. Poco después, pudieron localizar el vehículo estacionado en el aparcamiento de un restaurante de la carretera N-II, en el término municipal de Bellpuig. Parecía que se había detenido para comer o, como mínimo, para descansar un poco. Así, por los indicios que había de que pudiera estar allí, los agentes entraron en el establecimiento y lo vieron.
Persecución en el restaurante y detención sin la prueba de alcoholemia en Bellpuig
Sí, lo vieron, pero de manera fugaz, dado que justo acababa de salir por la puerta de atrás. Era un hombre que coincidía perfectamente con la descripción del conductor del camión que había circulado temerariamente por la A-2 minutos antes. Y parece que él también se percató de que lo buscaban, porque quiso huir corriendo y se produjo una pequeña persecución a pie con los agentes. Finalmente, los policías lo interceptaron y, tras identificarlo, comprobaron que, efectivamente, era el conductor del camión.
El hombre, de 50 años, presentaba síntomas evidentes de encontrarse bajo los efectos de bebidas alcohólicas. Por ello, los Mossos d'Esquadra le instaron a hacerse la correspondiente prueba de alcoholemia, pero se negó. Ante esta negativa, los agentes lo detuvieron por conducción temeraria, negativa a someterse a la prueba y por conducir bajo los efectos del alcohol. El martes pasó a disposición del Juzgado de Instrucción en funciones de guardia de Cervera (Lleida).