La Guardia Civil ha desarticulado una organización criminal que se dedicaba a alquilar viviendas en periodo vacacional a un precio muy por debajo del de mercado, llegando a estafar hasta 128 clientes en Barcelona y Tarragona, así como en otras ciudades del estado español como Madrid, Toledo, A Coruña, Valencia, Alicante, Ibiza y Murcia. En el marco de la operación se han detenido 29 personas y se está investigando a 13 más por los delitos de estafa informática, pertenencia a organización criminal, usurpación de identidad y blanqueo de capitales. El cerebro del grupo era un hombre que coordinaba todos los fraudes desde la prisión.
El pasado mes de septiembre, los agentes de la Benemérita detectaron un aumento significativo de las denuncias por estafas relacionadas con alquileres de viviendas durante los periodos vacacionales. Las personas afectadas accedían a páginas web y plataformas especializadas legales donde los delincuentes habían introducido sus propios anuncios sin que fueran detectados por las empresas propietarias de estos portales. El grupo captaba la atención de las víctimas ofreciendo precios muy por debajo del resto de viviendas, y les cobraba el dinero por adelantado.
Extensa red de 'mulas'
Los investigadores detectaron un patrón en todas estas ofertas, y averiguaron que la organización estaba formada por varios grupos que se dividían las tareas. Una parte de los delincuentes se desplazaba hasta las casas y pisos que tenían un grande atractivo turístico para obtener fotografías que después otro subgrupo insertaba en los anuncios que publicaban. Además, los agentes constataron la existencia de un tercer grupo que se encargaba de aportar documentación falsificada para poder abrir las cuentas bancarias donde depositaban el dinero conseguido en las estafas.
Finalmente, el grupo contaba con una red de 'mulas', que eran las encargadas de transferir el dinero entre las diversas cuentas para dificultar su rastreo, y también extraían el botín de cajeros automáticos distribuidos por todo el territorio nacional. Todas estas operaciones estaban organizadas y coordinadas por un hombre con un largo historial delictivo y que enviaba instrucciones desde la cárcel.
Más de 75 cuentas bloqueadas
La investigación, llevada a cabo por el Equipo de Delitos Informáticos y Telemáticos de la Guardia Civil, ha concluido con varias entradas y registros durante las cuales se han intervenido una gran cantidad de ordenadores y otros dispositivos electrónicos, así como documentación falsifica. Además, también se ha procedido con el bloqueo de más de 75 cuentas bancarias que los miembros de la organización utilizaban para ingresar el dinero obtenido de las estafas.