Los Mossos d'Esquadra detuvieron el domingo a un vecino de Alpicat (Segrià) de 34 años de nacionalidad que iba bebido y con su hijo, menor de edad, en el coche. Fue detenido por los delitos de de conducción temeraria, conducir bajo el efecto de las bebidas alcohólicas, negativa a someterse a la prueba de detección alcohólica y lesiones por imprudencia grave.
Una patrulla de Tráfico de la policía catalana fue en torno a las diez de la noche a la plaza Gaudí d'Alpicat a raíz de|junto a la salida de vía de un vehículo en una rotonda.
El hijo del conductor, herido
El acompañante delantero, menor de edad, presentaba heridas menos graves y el conductor, padre del chico, estaba herido leve y presentaba síntomas de encontrarse debajo lo influencia del alcohol.
El hombre dio un resultado de 1,04 mg/l en una primera prueba de alcoholemia y se negó a continuar con el resto de pruebas necesarias para validarla. Los Mossos determinaron que el vehículo había circulado a gran velocidad, en una calle limitada a 30 km/h.
Al llegar a la rotonda no habría podido dar el giro, impactando con la islita central y saliendo proyectado hasta sufrir la salida de vía. Además, el menor, hijo del conductor, no llevaba el cinturón de seguridad.
Detenido por conducción temeraria e ir bebido
Los agentes de los Mossos decidieron inmovilizar el vehículo y detener el conductor por los tres delitos contra la seguridad del tráfico y lesiones por imprudencia grave. El detenido pasó el martes a disposición judicial ante el juzgado de instrucción en funciones de guardia de Lleida, que lo dejó en libertad con cargos.