Conducir con responsabilidad es indispensable para evitar un accidente que se pueda volver mortal. Aunque eso parezca de sentido común, hay gente que no tiene en cuenta sus propias limitaciones y se pone al volante cuando bajo ningún concepto está en condiciones de hacerlo. Eso es exactamente lo que pasó el martes pasado, 29 de abril, en la autovía AP-7. El 112 registró varias llamadas por la mañana que alertaban de que, a la altura de Gelida (Barcelona) había un camión de gran tonelaje haciendo eses muy pronunciadas por la vía, poniendo en riesgo la vida del resto de conductores que circulaban por ella. Varias patrullas de los Mossos d'Esquadra se desplazaron hasta donde indicaba la última llamada y consiguieron parar al vehículo en el punto kilométrico 73. El conductor estaba claramente bajo los efectos de alguna sustancia y le hicieron la prueba de alcoholemia para cerciorarse.
Multiplica por seis la tasa de alcohol conduciendo un camión de 40 toneladas
El hombre, de nacionalidad española, sopló dos veces en el alcoholímetro, según el procedimiento habitual. La primera prueba dio un resultado de 0,89 miligramos por litro de aire espirado y la segunda solo bajó hasta los 0,87 miligramos; por lo tanto, el camionero había cogido el vehículo, que transportaba mercancía de alimentación y pesaba unas 40 toneladas, después de haber consumido grandes cantidades de alcohol hasta llegar a multiplicar por seis la tasa legal permitida. Por todo eso, el hombre quedó denunciado penalmente por un delito contra la seguridad vial por conducir bajo los efectos del alcohol y está a la espera de ser citado para pasar a disposición del Juzgado de Instrucción en funciones de guardia.
