Los grupos criminales itinerantes mantienen como base de operaciones Barcelona y, en muchos casos, se desplazan a otras ciudades de España aprovechando las fiestas patronales. Es el caso de las Fiestas del Pilar de Zaragoza, donde la Policía Nacional detuvo a varios individuos, la mayoría de nacionalidad extranjera, que se dedicaron a hurtar teléfonos móviles durante las celebraciones en la capital aragonesa. Los agentes los arrestaron el pasado 13 de octubre en el marco de un dispositivo especial contra los robos de móviles desplegado en el Espacio Zity, uno de los principales escenarios, y poco después descubrieron formaban parte de una banda que se desplazó desde la capital catalana.

El Grupo de Delincuencia de la Policía Nacional, en el marco de este dispositivo durante las grandes celebraciones zaragozanas, detuvieron a tres personas por sustraer dispositivos móviles, aprovechando la alta afluencia de público en el Espacio Zity de la ciudad. Además, las investigaciones posteriores permitieron determinar el origen de esta banda criminal: se había desplazado a Zaragoza procedente de Barcelona con el objetivo de cometer diferentes delitos durante las fiestas. Los agentes, en esta actuación, lograron recuperar 25 teléfonos, según ha explicado la Jefatura Superior de Policía de Aragón, que fueron devueltos a sus legítimos propietarios.

Uno de los detenidos es expulsado a Colombia

Muchos de los ladrones contaban con antecedentes, aunque hay uno en particular que tuvieron que comprobar su historial los agentes de la Brigada de Extranjería y Fronteras de la Policía Nacional. Este hombre, de nacionalidad colombiana y uno de los arrestados por robar durante las Fiestas del Pilar en Zaragoza, tenía una Orden de Expulsión dictada en abril de 2024 por la Subdelegación del Gobierno en Barcelona, además de numerosos antecedentes por hurtos, robos con fuerza, tráfico de drogas y atentado contra agentes de la autoridad.

Por todo ello, la Unidad de Extranjería formalizó el proceso de expulsión y, finalmente, fue deportado a Colombia. Los agentes del Grupo de Expulsiones de Zaragoza lo escoltaron hasta su país de origen y, además, se le ha impuesto una prohibición de entrada al espacio Schengen europeo durante cinco años.