Constantín, de 47 años, es uno de los dos detenidos por el robo millonario de las botellas de vino de la bodega Atrio de Cáceres. Él y Priscila, de 28 años, están en la cárcel de manera provisional como presuntos autores de los hechos. Ha salido a la luz el pasado delictivo de este ladrón, que tiene una predilección por robar botellas de vino. De hecho, en dos meses, tiene otro juicio por un caso clavado, pero en este caso, el robo fue en Madrid.
Dumitru Constantin Gabriel nació en Campina, una ciudad del distrito de Prahova, en Rumania. Este hombre de 47 años tiene doble nacionalidad: rumana y neerlandesa. En octubre del año pasado, junto con su pareja, Priscila, protagonizó uno de los robos más surrealistas de los últimos años en España.
El robo millonario de las botellas de vino de la bodega Atrio de Cáceres
Sustrajo 45 botellas de vino valoradas en 1,6 millones de euros de la elitista bodega Atrio de Cáceres. Según la investigación policial, él y la joven de 28 años huyeron justo después del robo y estuvieron muchos meses escondidos por Europa hasta que, finalmente, los detuvieron en la frontera de Croacia. Pasaron a disposición judicial y se decretó su entrada a prisión de manera provisional y sin fianza como presuntos autores del robo de la bodega más famosa de Cáceres.
Constantín tiene dos causas abiertas por otros robos de vino
Constantín tiene muchos antecedentes por hurtos similares, ya que su afición principal era robar botellas de vino elitistas. De hecho, tiene dos causas abiertas por estos hechos. Una para robar botellas de vino en el aeropuerto de Ginebra (Suiza) y otra para robar vino en Madrid. Por esta última, tiene el juicio el mes de octubre.
Robó una botella de vino valorada en 39.000 euros en una bodega grumete
Según la investigación de la Policía Nacional, fue a una bodega gourmet del barrio de Salamanca y se llevó una botella valorada en ni más ni menos que 39.000 euros, motivo por el cual podría estar una buena temporada en la prisión.
No obstante, de momento, solo han pasado a disposición judicial por el robo de Atrio. Aunque estuvieron escondidos de la justicia utilizando pasaportes falsos, la defensa dijo que no estaban escondidos, sino que habían ido a pasar unos meses de vacaciones por Europa. Esta excusa no convenció al juez, que no dudó a cerrarlos en la prisión de manera provisional, ya que el riesgo de fuga era muy elevado.
"Tenían una gran profesionalidad, especialización y perfecta planificación del robo"
La investigación de la Policía Nacional ha estado extremadamente complicada, ya que Constantín y Priscila lo tenían todo pensado al detalle. "Tenían una gran profesionalidad, especialización y perfecta planificación del robo", aseguran los agentes, que hicieron pública su detención por redes sociales.