La Nadia y su marido residían en Málaga, pero durante un tiempo de vacaciones que estaban en su país, en Bélgica, el hombre sufrió un ictus y después de tres meses acabó muriendo. La mujer decidió volver con el coche cargado de todos sus recuerdos y las cenizas de su marido hacia Málaga, para continuar con su vida de jubilada, y, al mismo tiempo, despedir a su marido tirado las cenizas en una playa del sur de España donde ellos dos habían pasado horas y horas paseando sus perros.

Plan de viaje torcido a Barcelona

El plan del viaje, romántico y emotivo, pasaba, este jueves, por Barcelona, donde la pareja tiene a uno de sus hijos, que hace años que vive allí. Después de horas de viaje desde Bélgica, la mujer había llegado a la capital de Catalunya. Y aquí, en nuestra casa, está donde todo se ha torcido.

Hoy por la mañana, cuando han ido a buscar el coche para continuar con la ruta, en el paseo de Picasso, en el distrito de Ciutat Vella, justo delante del parque de la Ciutadella, se han encontrado una de las ventanillas rotas. Faltaban objetos en el interior. Un ladrón ha roto el cristal y se ha llevado varias cosas, entre otras, una maleta con ropa, una bolsa con gafas, las llaves del piso de Málaga y también la urna donde estaban las cenizas del hombre muerto y que tenían que ser tiradas en la playa de Almayate.

Los hechos son de esta noche, asegura Nadia, que explica a ElCaso.com que la ropa y las maletas no tienen nada de importancia ante la grave pérdida de las cenizas de su marido. Junto con su hijo esperaban a media mañana que la policía apareciera en la zona donde estaba el coche con el fin de poder denunciar los hechos, pero la han hecho ir hasta la comisaría de Ciutat Vella, en Nou de la Rambla, para presentar denuncia.

El hijo de Nadia esperaba al lado del coche y, con unas amigas, han repasado los contenedores de la zona por si podían localizar la urna. Cuando los ladrones hayan descubierto que habían robado el cuerpo hecho cenizas de una persona, esperan, que no lo hayan estropeado y que lo hayan abandonado con precaución con el fin de poder ser recuperado. Hoy por hoy, sin embargo, las cenizas del marido de Nadina todavía no han aparecido. Cada hora que pasa, la mujer y su hijo, entre llantos, empiezan a entender que puede ser muy complicado recuperar la urna.

Cenizas del marido robadas en Barcelona

Más allá, evidentemente, del valor económico de la urna que ha sido sustraída, lo que no se puede pagar con dinero es el valor sentimental del recuerdo de una persona que has amado y que ya no está. Las cenizas tenían que ser tiradas en una playa donde Nadia y su marido paseaban al perro, en un pueblecito junto a Málaga, en Almayate, y ahora están desaparecidas, en el mejor de los casos, en manos de unos ladrones, o vertidas en cualquier parte.

Nadia, entre llantos, espera poder recuperar la urna con las cenizas de su marido, que ha acabado en manos de unos ladrones en Barcelona | Cedida.

Son habituales este tipo de robos en algunas zonas de la ciudad y también en aparcamientos públicos de Barcelona. El coche llevaba varias maletas y artículos, del trasladado de Bélgica a Andalucía, que se veían desde el exterior, que ha hecho que el coche se viera suculento a ojos de los ladrones. Cuando los Mossos d'Esquadra reciban formalmente la denuncia, abrirán una investigación para intentar localizar al o a los ladrones y poder colaborar con Nadia para recuperar las cenizas de su difunto marido.