Nuevo incidente donde la policía tiene que hacer marcha atrás y retirarse por la violencia de jóvenes en pleno botellón. Pasó la madrugada del pasado 11 de octubre, la noche antes de la fiesta del 12 de octubre, en la zona más industrial de la calle del Cobalt, en Hospitalet del Llobregat (Barcelona). Tal como ha podido saber ElCaso.com y han confirmado fuentes municipales, un grupo de unas 200 personas estaban en la vía pública bebiendo.
En esta zona de Hospitalet, con naves industriales y en lo tocando a la ronda de Dalt, es habitual que los fines de semana se concentren personas para hacer botellón. La noche de este lunes no fue menos y el grupo de personas, unas 200, según fuentes de la policía local de Hospitalet, se concentraron allí.
Recibos a golpes de botella después de un atropello
Durante la fiesta ilegal el conductor de un coche hizo una maniobra y atropelló a una persona, que quedó herida en el suelo. El conductor se escapó y los testigos llamaron al 112, que activó una ambulancia del Sistema de Emergencias Médicas (SEM) y patrullas de la Guardia Urbana de Hospitalet.
Al llegar las dotaciones en el lugar, los asistentes en la fiesta hicieron lanzamientos de botellas de cristal contra la policía y contra la ambulancia, obligando a los policías y en los sanitarios a protegerse, evacuar como pudieron a la persona herida y seguir la estabilización del herido en algunas calles, lejos de la turba violenta que tiraba botellas contra la policía.
En el incidente de la noche del lunes fueron cuatro las patrullas de la Guardia Urbana de Hospitalet que fueron atacadas. Según han explicado fuentes sindicales de SPL-CME, eran las cuatro únicas patrullas que estaban activas por toda la ciudad, que fueron derivadas al incidente de la calle del Cobalto. Según fuentes municipales, ninguno de los agentes ni de los sanitarios del SEM resultaron heridos.
Sin refuerzo de orden público
Hace tiempo que la policía de Hospitalet no puede contar con una unidad que hace años hubiera podido intervenir con seguridad con una acción como esta, la conocida como Yanki, una unidad de intervención, a medio camino de la seguridad ciudadana y el orden público. El Ayuntamiento de Hospitalet de Llobregat tiene congelada esta unidad -disponen de cuatro furgonetas y material antidisturbios- por conflictos laborales, si bien los últimos meses han asegurado que su intención era volver a ponerla en marcha.
Las cuatro furgonetas de la unidad Yankee de la Guàrdia Urbana de Hospitalet, congeladas / Cedida
Esta falta de refuerzo en orden público y la escalada de violencia contra la policía, como el ataque de una turba violenta este fin de semana en el barrio del Gótico de Barcelona contra una patrulla de los Mossos d'Esquadra, hace sufrir a los representantes de la policía, que aseguran que el nivel "de incivismo" y "transgresión de las normas básicas" nos puede traer, según SPL-CME Hospitalet, a un "desenlace fatal".
"Si no se pone remedio a eso antes de que pase alguna cosa irreversible, nos encontraremos con calles descontroladas y policías atados de pies y manos por la falta de recursos personales y materiales, de leyes que protejan su trabajo y su integridad, y de una sociedad que dé apoyo su tarea", se asegura desde el mismo sindicato.