Nueva alerta de la Dirección General de Tráfico (DGT). Esta vez, la DGT advierte en sus publicaciones oficiales de la proliferación de un nuevo modo de delincuencia: los crackers. Se trata de ciberdelincuentes profesionales que utilizan virus informáticos para robar, e incluso 'secuestrar', los coches, unos delitos que se están multiplicando en los últimos tiempos sin necesidad de emplear la fuerza física.

¿Qué es un cracker?

Al igual que el hacker, el cracker es también un apasionado del mundo informático. La principal diferencia consiste en que la finalidad del cracker es dañar sistemas y ordenadores. Tal como su propio nombre indica, el significado de cracker en inglés es «rompedor», su objetivo es el de romper y producir el mayor daño posible.

HackeCar, un medio digital especializado en motor, ciberseguridad y tecnología, explica: "El ciberataque más común en todo el mundo tiene como protagonista al sistema keyless". Este sistema permite acceder y arrancar un vehículo sin necesidad de sacar la llave del bolsillo o bolso, hecho que facilita el poder robar el automóvil o lo que haya en su interior. Por eso, muchos expertos recomiendan abrir el coche de la manera más tradicional, introduciendo la llave en la cerradura, para evitar dar facilidades a los delincuentes.

Se trata solo de un ejemplo, según explica la DGT. Tal y como ha recogido la empresa EUROCYBCAR, que cuenta con una base de datos con todos los ataques contra vehículos que se han producido desde el año 2012, un ciberdelincuente puede utilizar el sistema bluetooth para que cuando se vinculen teléfono y vehículo pueda obtener tus datos e información personal, utilizarlo para conocer tu posición y espiarte, acosarte o suplantar tu identidad.

Y es que cuantos más datos personales introducimos en Internet y cuanto más conectados estamos, ya sea en el hogar, el móvil o en el coche, más probable es que seamos víctimas de alguna forma de ciberdelincuencia. De hecho, en 1976, Bill Gates escribió una carta abierta en la que condenaba el código abierto y la piratería de software. Hoy la ciberdelincuencia mundial está mucho más preparada y es más dañina.

¿Cómo se secuestra un coche?

Pueden controlar todo el vehículo: desde atacar el sistema de llamada de emergencia para evitar que te asistan en caso de accidente, como activar o desactivar los airbags, tomar el control de dirección y frenos para provocar un accidente, proporcionarte información falsa a través del GPS o del sistema RDS de la radio. Por no hablar de las apps, cada vez más comunes, con las que el usuario puede controlar desde su móvil y a distancia diversas funciones del vehículo, pero que podrían permitir a un 'cracker' espiar a un usuario, acceder a bases de datos de la marca o arrancar un coche a distancia.

Las vías más usuales para entrar son el sistema de acceso sin llave, que se sitúa en el 47% de los casos, seguido por los servidores (17%), las aplicaciones móviles (6%), el sistema de información (4%), la unidad de control del motor (4%), el sistema de infoentretenimiento (4%), el puerto de comunicación entre unidades de mando (4%) y el bluetooth (2%).

¿Hay soluciones?

Desde 2010 los ataques fueron multiplicándose hasta que en 2018, el FBI alertó a los fabricantes de que estaban en el punto de mira de los 'crackers'. Pero no te preocupes. La ONU ha desarrollado una norma que unifica los criterios y los requisitos e implanta las bases mínimas de ciberseguridad para todos los vehículos. El Reglamento UNECE/R155 obliga a que todos los vehículos, ya sean automóviles, camiones, furgonetas o autobuses, que se homologuen a partir de julio de 2022 y todos los que se vendan a partir de julio de 2024 cuenten con un certificado de vehículo ciberseguro.