Diez personas murieron en un tiroteo en un supermercado de Boulder, una ciudad de Colorado, en Estados Unidos. Ahmad Alissa tiene 21 años y ha sido identificado por las autoridades estadounidenses como el autor de la matanza.
Masacre en un supermercado en Colorado
Los hechos ocurrieron este lunes a las 14:30. Por causas que todavía se están investigando, Alissa empezó a disparar a destajo a las personas que se hallaban haciendo la compra en el supermercado de la cadena King Soopers en Boulder. Los supervivientes que consiguieron escapar llamaron a la policía, que procedió a la detención del homicida. Eric Talley, un agente de 51 años, el primero en llegar, fue asesinado.
Nacido en Siria, a los tres años Alissa ya residía en Estados Unidos, donde se mudó su familia. Ahora vivía en Arvada, Colorado, a apenas 48 kilómetros del establecimiento en el que perpetró su masacre.
Su propio hermano le ha tachado de una persona “paranoica” y “muy antisocial” en una entrevista a The Daily Beast. Algo que corroboran quienes fuesen sus excompañeros en el equipo de lucha libre en el que Alissa competía, en el Arvada West High School. Daily Mail recoge que, durante su etapa en aquel equipo, dejó bien claro su comportamiento violento, llegando a amenazar a algunos compañeros con matarles cuando estaba enfadado.
Ahmad Alissa, de más joven / Metro
En las redes sociales también había dado cuenta de su marcado y volátil carácter. Odiaba a Donald Trump, denunciaba la islamofobia existente en el país y de forma recurrente cargaba contra la sociedad, llegando a quejarse de no tener novia, según Telecinco. Su hermano ha explicado que su matanza no tendría motivaciones políticas y le ha descrito como un “enfermo mental”, señalando que en un principio era una persona extrovertida, pero todo cambió en Secundaria, donde habría sido víctima de acoso.
10 víctimas mortales
Ahmad Alissa, primero, disparó a un hombre en el parking del supermercado. Cuando estaba malherido, tirado en el suelo, volvió a dispararle repetidamente. Después entró al establecimiento y continuó sembrando el caos. Las autoridades lograron reducirlo después de intercambiar disparos que le alcanzaron en una pierna.
Actualmente Alissa está hospitalizado en estado estable y se prevé su traslado a la cárcel de Boulder una vez reciba el alta, según el fiscal del municipio, Michael Dougherty.
Las diez víctimas tenían edades comprendidas entre los 20 y 60 años. Entre ellos hay un policía, Eric Talley, padre siete hijos.
Nuevo tiroteo en Estados Unidos
Hace unos días un nuevo tiroteo en Atlanta sacudía los Estados Unidos. El suceso, que dejó ocho muertos, entre ellos seis mujeres de origen asiático, reavivó el debate en Estados Unidos sobre los crecientes ataques de odio contra estadounidenses con raíces en Asia, que han alcanzado casi 3.800 en todo el país desde que comenzó la pandemia.
No obstante, el homicida, Robert Aaron Long, 21 años, negó que sus actos tuvieran una "motivación racial" y lo achacó a una perturbación derivada de su "adicción sexual". Long había frecuentado los salones de masaje antes del ataque y "los culpaba por proporcionar una forma de mantener activa su adicción al sexo", explicó en una rueda de prensa Jay Baker, el capitán de la oficina del condado de Cherokee, contiguo a la ciudad de Atlanta. "Para él, eran una tentación que quería eliminar", añadió el capitán.
Robert Aaron Long / RRSS
"Fuera cual fuera la motivación, sé que los estadounidenses de origen asiático están muy preocupados", dijo Biden en declaraciones a la prensa. "Llevo dos meses hablando sobre la brutalidad contra los estadounidenses de origen asiático y creo que es muy, muy preocupante", añadió el presidente. El suceso también llevó al expresidente Barack Obama (2009-2017) a pedir que se reactive en el país el debate sobre el control de armas para contener el auge de los tiroteos masivos, que ya suman al menos 72 este año y que aumentaron el 50 % en 2020, según la organización Archivo Sobre la Violencia Armada.
El fusil semiautomático que portaba Alissa durante el asalto al supermercado es el más vendido en el país. En su domicilio había más armas. El presidente Joe Biden se ha reconocido devastado y ha pedido al congreso que se prohibiese la venta de armas de guerra.