No es extraño tener deudas pendientes. Quizás solicitamos un crédito al banco por un negocio que no funciona tan bien como habíamos pensado, nos hemos quedado sin trabajo y eso nos ha retrasado a la hora de pagar los plazos del coche, o quizás hemos tenido problemas con la hipoteca. A veces, el problema no es tener que pagar una deuda, sino que se nos acumulen varios préstamos a la vez y tengamos muchos frentes abiertos. Para poner fin a eso, existe la opción de unificar las diversas deudas en una sola, cosa que nos permite tener que hacer un único pago mensual y de esta manera facilitarnos la planificación, una solución que puede ser muy útil, pero tenemos que asegurar-nos con quien hacemos este tipo de tratos porque en algunos casos podemos acabar siendo víctimas de una estafa.

Algunos ciberdelincuentes se aprovechan de la situación de vulnerabilidad de las personas que se encuentran en esta posición y les ofrecen la posibilidad de unificar sus deudas, pero les están engañando. En algunos casos, te cobran unos intereses mayores a los que se tenían que abonar antes, lo que acaba haciendo que pagues todavía más y que tus problemas crezcan. Otros, ni siquiera buscan hacer nada con las deudas, sino que te pedirán algún pago inicial y, cuando lo hagas, simplemente desaparecerán después de haberte quitado el dinero.

Evitar el engaño

Si te piden dinero antes de explicarte el funcionamiento ni de confirmar nada, ve con cuidado, ya que es muy probable que se trate de un engaño y solo busquen aprovecharte de ti. Antes de dar datos bancarios nos tenemos que asegurar de que se trata de un negocio legítimo y que realmente nos servirá para ayudarnos a solucionar nuestras deudas en lugar de crearnos más problemas de los que ya tenemos. En caso de contratar una empresa de consolidación de deudas, es importante dejarlo todo por escrito y firmado antes de hacer ningún pago.