Victoria en los tribunales para la exmujer de Josep Maria Mainat, Angela Dobrowolski. El Juzgado de lo Penal número 6 de Barcelona la ha absuelto del delito de quebrantamiento de medida cautelar del que se le acusaba y por el que fue juzgada el pasado marzo, por enviarle un mensaje de correo electrónico a su exmarido a pesar de tenerlo prohibido. Dobrowolski tenía una orden de alejamiento de 1.000 metros de Mainat, así como la imposibilidad de comunicarse con él por cualquier medio desde el 2020, por haber intentado matar al excantante, presuntamente, con insulina.

La magistrada que instruía el caso ha dictaminado a favor de la procesada, alegando que "no se ha considerado probada la comisión de esta infracción criminal", según consta en el auto judicial. De esta manera, Angela Dobrowolski se ha librado de la condena de un año de prisión que pedía la Fiscalía, teniendo en cuenta la agravante de reincidencia. Por su parte, Mainat no formuló ninguna acusación contra su expareja.

Ya se saltó la orden de alejamiento

El año 2020, pocos meses después de que entrara en vigor la medida cautelar, Dobrowolski se la saltó, por lo que acabó encarcelada. Durante la vista, la acusada hizo referencia a estos hechos para dar apoyo a su versión, según la cual no fue ella la autora del mail que recibió Mainat. Según ella, "la prisión fue una experiencia muy dura" y que "no cometería dos veces el mismo error, y más por enviar un correo inútil".

Siempre según la versión de Dobrowolski, fue una amiga suya, con quien convivía en el momento de los hechos, quien envió en su nombre el correo electrónico con contenido "personal y vejatorio", desde una dirección que, a pesar de reconocer que era la suya, aseguró que estaba en desuso. Además, el contenido estaba escrito en castellano, y ella y su exmarido "se comunicaban siempre en catalán". Con respecto al contenido del mensaje, de carácter personal entre los dos afectados, la acusada manifestó que eran parte de un texto que había escrito ella misma, en castellano, para un libro que todavía está por publicar.

Por su parte, Josep Maria Mainat admitió que entre ellos se comunicaban mayoritariamente en catalán, y que el mensaje estuviera redactado en castellano le hizo dudar de la autoría del mismo. Por todo eso, la magistrada ha considerado que existe "duda razonable, que se tiene que valorar a favor del reo." De esta manera, "ante la falta de pruebas de cargo suficientes de los hechos que integran el tipo delictivo" por el que el ministerio público acusaba a Angela Dobrowolski, la acusada ha quedado absuelta y no se la considera responsable del delito imputado.