Cuatro personas han resultado heridas en un apuñalamiento masivo que este jueves por la tarde ha tenido lugar en las puertas del centro comercial Ratina, en la ciudad finlandesa de Tampere, a unos 180 kilómetros en el norte de Helsinki. Los hechos han tenido lugar minutos antes de las tres y media de la tarde en un momento en que el centro comercial estaba lleno de gente, incluidas muchas familias con niños, cosa que ha provocado momentos de pánicos con mucha tensión y carreras. Una vez se ha alertado de los hechos a los servicios de emergencias, un gran número de efectivos policiales y sanitarios se han desplazado rápidamente hasta el lugar.
El agresor, detenido
La policía ya ha podido detener al presunto agresor, un chico finlandés de unos 20 años, según el medio local Ilta-Sanomat, y ya no hay ningún peligro más para la población, tal como ha expresado el cuerpo policial del país nórdico en un comunicado. Los equipos médicos han atendido a las cuatro víctimas de las heridas, pero no se teme por la vida de ninguna de ellas. Toda la plaza donde se han producido los hechos, que ha quedado llena de restos de sangre, ha sido acordonada y se ha cerrado el acceso al centro comercial, de donde no ha podido entrar ni salir nadie. Sin embargo, las tiendas del interior se han mantenido abiertas.
La policía ha abierto una investigación para aclarar los hechos y los testigos del incidente han sido trasladados a la segunda planta del centro comercial, para después ser interrogados en un restaurante cercano. Hoy por hoy, según las primeras investigaciones, no se contempla que se trate de un acto de terrorismo o racismo, pero todavía no se han podido determinar la motivación del ataque. A estas alturas, está siendo investigando como presunto autor de cuatro intentos de asesinato.
Tercer apuñalamiento en un centro comercial de Finlandia en un año
La de este jueves es la tercera agresión con arma blanca que se produce en un centro comercial de Finlandia en poco más de un año. Las dos anteriores tuvieron lugar en junio de 2024, cuando con muy pocos días de diferencia y en el mismo centro comercial de la ciudad de Oulu, un activista de extrema derecha apuñaló a un niño de 12 años y un adolescente apuñaló a otro hombre. En los dos casos las víctimas eran de origen extranjero y se determinó que los ataques tenían una motivación racista.