Los Mossos d'Esquadra parece que han resuelto el crimen de Tarragona. Ayer a las ocho de la noche apareció el cuerpo sin vida de una mujer de 91 años en un piso de la calle Pin i Soler, en el centro de la ciudad. A pesar de los esfuerzos del Sistema de Emergencias Médicas (SEM), nada se pudo hacer para salvarle la vida.

La policía catalana confirmó que el cuerpo de la anciana presentaba signos de violencia, que fue estrangulada e inició una investigación.

Descartado que la muerte de la mujer pudiera estar relacionada con un robo, la policía centró sus investigaciones en el entorno más próximo a la mujer de 91 años.

El presunto asesino se entrega a Barcelona

La sorpresa llegó entrada la madrugada. Un hombre de 70 años, de nacionalidad española y vecino de Barcelona, entró en la comisaría de los Mossos d'Esquadra de Sant Andreu de Barcelona y se entregó, según ha podido saber este medio de fuentes policiales.

Explicó que hacía poco rato, en Tarragona, había matado con sus propias manos a una mujer, una familiar suya, de edad avanzada. Después de oír estas palabras, los agentes lo detuvieron, acusado de un presunto homicidio.

Relación familiar con la víctima

Fuentes de la investigación ha confirmado a ElCaso.com que el hombre conocía a la mujer muerta y que formaba parte de su núcleo familiar, aunque a estas alturas todavía no se ha aclarado cuál era su relación exacta. No es el hijo ni tampoco el nieto, según fuentes de los Mossos d'Esquadra.

Tarragona

El bloque de pisos de la calle de Pin y Soler, 11, de Tarragona, donde se ha encontrado la mujer muerta / Roger Segura

El detenido ha sido trasladado de Barcelona a Tarragona y será puesto a disposición judicial hoy o mañana, según avancen las investigaciones que lidera el Área de Investigación Criminal (AIC) de la región policial del Camp de Tarragona.

Octava muerte violenta en Catalunya este 2021

Esta es la octava muerte violenta que se ha registrado en Catalunya este 2021, la primera en las comarcas de Tarragona.

Si se confirma que el detenido es el autor de la muerte de la abuela de Tarragona, sólo quedarán dos crímenes por resolver: el de una mujer mayor, de 96 años, de Calella, que fue asesinada en su casa con cuchilladas por la espalda, Margarita, y el crimen de Otman Chaibi, un hombre marroquí que apareció con heridas de arma blanca en una carretera del Alt Empordà a finales de febrero.