El próximo 21 de marzo entra en vigor la nueva Ley de Tráfico, una serie de modificaciones con las que la DGT ha endurecido varias de sus sanciones, además de incluir nuevas infracciones. Una de las más temidas y esperadas es la de coger el móvil mientras conducimos, aunque sea solo manipularlo durante unos segundos, que ahora se sancionará con multas de 500 euros y la pérdida de hasta seis puntos del carnet de conducir.
Trucos para evitar coger el móvil mientras conducimos
El endurecimiento de la medida tiene como objetivo evitar los accidentes mortales causados por distracciones, que suponen una de las causas más comunes, llegando al 31% en datos de 2020. De hecho, un total de 319 accidentes mortales fueron causados por este motivo, tres puntos por encima de los datos de 2019. Ante estas brutales multas por manipular el móvil y el riesgo que supone, aunque es una acción frecuente entre los conductores, es recomendable tener una serie de trucos para evitar la tentación.
Lo más fácil es alejarnos de él una vez al volante, metiéndolo en la guantera o en el bolso o mochila, incluso dejándolo en la parte trasera del vehículo o guardándolo en el maletero. Y es que, en un mundo tan marcado por la tecnología, tener el móvil al lado provoca la gran tentación de mirar mensajes, contestar llamadas o revisar nuestras redes sociales, algo que ahora será una infracción considerada grave. También se pueden buscar soluciones sin necesidad de desterrar nuestro teléfono.
Salvarnos de la brutal multa: seis puntos y hasta 500 euros
Ponerlo en silencio o en modo avión para evitar que nos lleguen notificaciones con sonido y, de nuevo, caer en la tentación de cogerlo para ver quién nos escribe, poniendo en riesgo nuestra vida y la del resto de usuarios de la vía, es también un gran truco. Además, podemos avisar a las personas con las que teníamos una conversación de WhatsApp u otra red social a medias de que nos disponemos a conducir y estaremos fuera de servicio durante un tiempo.
Volviendo a datos de la DGT, utilizar el móvil mientras conducimos multiplica por cuatro el riesgo de sufrir un accidente, al igual que con el alcohol. Es por eso que, aunque sea para poner en orden el GPS, que hay que llevar en el salpicadero con un soporte homologado y se recomienda usar con voz para no tener que mirar la pantalla, costará el doble de caro, ascendiendo a la pérdida de seis puntos del carnet y multas de hasta 500 euros. Otras fuentes de Tráfico advierten del gran peligro para el resto de personas cuando nos distraemos al volante.
Y es que no concentrarse en la carretera hace que prestemos menos atención de la necesaria a la carretera, provocando que perdamos la perspectiva, no guardemos la distancia de seguridad con el vehículo de delante, así como incapacitarnos para mantener una velocidad constante y aumentar significativamente el tiempo de reacción ante un imprevisto. Además, si se combina con altas velocidades, el riesgo de provocar un accidente se multiplicará exponencialmente. Y es que, por ejemplo, tres segundos de conducción a 120 kilómetros por hora son equivalentes a cruzar la distancia de un campo de fútbol.