Con calcetines en los bolsillos para no dejar huellas dactilares. Con esta prenda de ropa es como pillaron los Mossos d'Esquadra a dos jóvenes en Parets del Vallès que entraron en el interior de dos bloques de pisos de la calle Prat de la Riba de este municipio de Barcelona. Los hechos tuvieron lugar el jueves, 18 de diciembre, cuando una patrulla de paisano, que hacía servicio de prevención de robos con fuerza en el interior de domicilios, observó a dos hombres con actitud muy sospechosa delante de un bloque de pisos y, en un momento dado, que manipulaban la cerradura para poder entrar. Los agentes decidieron hacer vigilancia de los dos sospechosos y vieron cómo, minutos después, salían del bloque de pisos para intentar entrar en el edificio de al lado, pero finalmente no lo hicieron, ya que se encendió la luz de la escalera.
Los policías vieron, en un tercer bloque de pisos, anexo a los otros dos, cómo un señor accedía para ir a su casa y cómo los dos sospechosos, que hacía rato que los vigilaban, accedían también dentro del edificio. Ante la actitud de los dos jóvenes, que entraban y salían de todos los inmuebles, los agentes esperaron a que volvieran a la calle. Cuando los chicos salieron, los Mossos los detuvieron y los identificaron. En el registro, los policías encontraron que ambos individuos llevaban material para forzar puertas y acceder a robar en las casas: un destornillador, otra herramienta con forma de Y con tres tamaños de llaves de tubo diferentes y calcetines, que utilizaban como si fueran guantes para no dejar sus huellas. Además, los policías les encontraron una riñonera con 200 euros en efectivo y pudieron comprobar que la puerta de acceso al primer bloque había sido forzada.
Grup de Delinqüència Urbana
Con todo, los Mossos detuvieron a ambos jóvenes, uno de 22 años y el otro menor de edad, como supuestos autores de un delito de robo con fuerza en grado de tentativa. La policía catalana, sin embargo, no ha comunicado la nacionalidad, la edad ni los antecedentes policiales de ambos individuos.
Los agentes que participaron en esta intervención forman parte del Grup de Delinqüència Urbana de la Comisaría de Mollet del Vallès, también conocido como Fura, que son agentes de los Mossos d'Esquadra que trabajan de paisano dentro de las Unitats de Seguretat Ciutadana. Como su nombre indica, están especializados en combatir contra la delincuencia urbana, especialmente la multirreincidencia y bandas dedicadas a hurtos y robos.